El vicepresidente de Ecuador, Lenin Moreno, dejará mañana jueves su cargo en vísperas de que el presidente Rafael Correa jure para un nuevo mandato presidencial tras su reelección de febrero pasado.
La vicepresidencia será asumida por Jorge Glass, en relevo de Moreno, quien en 2012 anunció que dejará la vida política para dedicarse a su familia y actividades particulares.
Moreno dijo hoy a la televisión local que su partida servirá para "refrescar al gobierno".
"Nadie es indispensable, lo indispensable son los procesos históricos, los seres humanos somos transitorios, y yo pensé que era importante dar una alternancia, refrescar al gobierno retirándome de la política y del sector público", afirmó Moreno.
La decisión de alejarse de la vida política quedó en firme a inicios de este año cuando no aceptó ser candidato a la reelección con Correa por el movimiento izquierdista Alianza PAIS en los comicios celebrados el pasado 17 de febrero.
La negativa de Moreno hizo que Correa eligiera a Glas, entonces ministro coordinador de Sectores Estratégicos, como su binomio para la contienda, que ganó de forma contundente para un tercer mandato (2013-2017).
Moreno, quien sostiene que su participación en el gobierno fue "debut y despedida", indicó que de ahora en adelante se dedicará a apoyar un negocio familiar y a su labor de motivador profesional a través de conferencias que llevan un mensaje de alegría, solidaridad y amor.
"No me gusta la política y el servicio público me atosigó un tanto, quiero cambiar de actividad", dijo el vicepresidente, quien hace más de una década recibió un disparo en su columna que le ocasionó una discapacidad que le obliga a movilizarse en silla de ruedas.
Moreno, quien goza de una alta aprobación ciudadana, lidera varios programas sociales del gobierno en favor de los discapacitados, por los cuales ha recibido el reconocimiento de organismos internacionales y algunos países, interesados en replicar el modelo ecuatoriano.
Su labor ha cambiado la realidad de miles de discapacitados, beneficiados principalmente, con la "Misión Solidaria Manuela Espejo", el programa "Joaquín Gallegos Lara", que consiste en ayuda médica, técnica y la entrega de un bono.
Aun así, Moreno sostuvo que aún queda mucha por hacer y confió en que estos programas se fortalezcan en el nuevo período de gobierno.
"El ser humano es por esencia insatisfecho y más aún cuando falta tanto por hacer, sin embargo, estamos claros que el camino está trazado", apuntó tras indicar que la "gran sensibilidad" de Correa por los sectores vulnerables dará continuidad a los programas.
Tras la salida de Moreno, el gobierno ha anunciado que creará una Secretaría Técnica para que asuma el manejo de dichos programas, puesto que el nuevo vicepresidente se enfocará en apuntalar los sectores estratégicos y lograr un cambio en la matriz productiva.
Al mismo tiempo, Moreno deseó suerte al mandatario en su tercer mandato, luego de que enero de 2007 asumió el poder por primera vez y en abril de 2009 fue reelegido en comicios anticipados.
"El presidente con todo derecho ha optado por un periodo adicional como reza la Constitución, y pues, que puedo, sino desearle muchísima suerte al querido compañero y amigo Rafael Correa, y a Jorge Glass que cumplirá eficientemente la tarea de vicepresidente", expresó.
Correa, quien tomará posesión del cargo el viernes en una ceremonia en la Asamblea Nacional (Congreso), ha dicho dejará la vida política luego de 2017 cuando termine su gestión.
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