El gobierno de Brasil lamentó hoy martes la tragedia que dejó el paso de un tornado en Oklahoma, sur de Estados Unidos, que mató por lo menos a 24 personas, entre ellos niños y adolescentes de una escuela pública. El ministerio brasileño de Relaciones Exteriores manifestó en un comunicado su solidaridad al gobierno y la población estadunidense por los devastadores efectos del fenómeno.
"El gobierno brasileño tomó conocimiento, con gran pesar, de las muertes y pérdidas materiales provocadas por el tornado que afectó la región de Oklahoma City, en los Estados Unidos", dijo el comunicado.
"Brasil transmite sus condolencias y solidaridad a los familiares de las víctimas, al pueblo y el gobierno de Estados Unidos", añadió el documento.
De acuerdo a versiones noticiosas, más de 120 personas son atendidas en hospitales de Oklahoma, entre ellos un medio centenar de niños lesionados.
Los equipos de búsqueda y rescate buscan más víctimas del tornado, que pasó por la localidad de Moore, a 10 kilómetros al sur de Oklahoma City.
Una escuela primaria fue destruida y por lo menos 20 niños y adolescentes que estaban en el lugar murieron.
En 1999, una serie de tornados dejó en Moore 40 muertes y daños por más de 1.000 millones de dólares.