Tras conocerse la noticia del acuerdo agrario alcanzado luego de seis meses de negociación entre el Gobierno colombiano y las FARC en La Habana, Cuba, los diversos gremios agropecuarios del país reaccionaron hoy de forma encontrada.
La Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC) dijo que no se pronunciará sobre dicho acuerdo hasta que se conozcan los detalles concretos que de acuerdo con el saliente Ministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo, solo serán revelados una vez concluyan las negociaciones en los cinco puntos de la agenda y se firme definitivamente el fin del conflicto.
"Sería irresponsable opinar sobre lo anunciado con relación al tema del sector agrícola y pecuario sin haber analizado lo acordado entre Gobierno y guerrilla", expresó Rafael Mejía López, presidente de este gremio agropecuario.
Mejía destacó que independientemente de la evolución del proceso de paz, para el gremio es importante que el Gobierno genere condiciones más competitivas en el sector y que se respete el modelo económico en el que se protege la propiedad privada bien habida y la actividad productiva.
"Para la SAC es muy importante que se mantenga la posición planteada por el Gobierno al inicio de las negociaciones y es que el modelo económico no es negociable", señaló el dirigente en un comunicado.
De igual forma respondió Jens Mesa, presidente de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma) quien a pesar de considerar positivo cualquier paso que acerque al país a una paz definitiva, opinó que es fundamental para el sector agropecuario conocer el texto para opinar sobre los alcances de este acuerdo.
Por su parte el director de la Fundación para el Desarrollo Agroindustrial de la Altillanura (Fundallanura) Napoleón Viveros, opinó que es importante confiar en el trabajo del equipo negociador del gobierno en la mesa de diálogos que confió protegerá los intereses del sector empresarial.
"El Gobierno tiene la buena intención de favorecer la propiedad privada y, bajo esa premisa, estamos tranquilos. Creeríamos que se va a respetar al sector empresarial y a la propiedad privada", dijo.
Por el contrario, el presidente de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), José Félix Lafaurie, opinó que lo poco que fue revelado este lunes sobre el acuerdo agrario, indicó que no hay nada nuevo a las "promesas no cumplidas" escuchadas por los campesinos colombianos desde hace más de cinco décadas.
"Para reconocer el abandono del campo no se necesitaban seis meses de negociaciones con las FARC (...) hemos denunciado durante décadas el sesgo antirrural del modelo de desarrollo del país sin que nada cambie, y ahora como por encanto y gracias a las FARC va a ser posible la resurrección del campo", expresó.
Lafaurie añadió que es bien sabido que la guerrilla de las FARC controla las zonas de reservas campesinas en zonas como el valle del Cimitarra y San Vicente del Caguán por lo que dijo que "negociar el desarrollo rural con las FARC es como negociar con los atracadores de banco una reforma financiera" .
Tras el cierre del primer punto de la agenda de paz, las partes reiniciarán los diálogos el próximo 11 de junio cuando abordarán el segundo punto relacionado con la desmovilización de las FARC y la participación de sus miembros en el escenario político de Colombia.
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