El hombre que presuntamente arrojó ácido sobre un niño desfigurándole, se entregó a la policía en la mañana de hoy viernes en la provincia oriental china de Jiangsu.
El sospechoso, de apellido Cai, se presentó de manera voluntaria en una comisaría de Nanjing, capital provincial, en compañía de su hermano.
Cai admitió haber vertido ácido sobre un estudiante de cuarto grado de 11 años de edad cuando éste se dirigía de camino a la escuela el jueves por la mañana.
La cara del menor sufrió quemaduras de consideración, por lo que se le ha ingresado en la unidad de cuidados intesivos del Hospital Pediátrico de Nanjing.
Según la investigación inicial, Cai quería vengarse de la madre divorciada del niño, con la que había tenido citas anteriormente.
Continúan las pesquisas.