Uno de cada cinco consumidores holandeses ha reducido su consumo de carne tras los recientes escándalos europeos en torno a este producto, declaró hoy la Fundación Holandesa por la Naturaleza y el Medio Ambiente en un comunicado de prensa.
La organización llevó a cabo una investigación que muestra que el 11,6 por ciento de la población holandesa consume más carne de animales criados con criterios especiales de seguridad (biological meat) desde que ocurrió el escándalo de la carne de caballo en Europa. Por otra parte, el 7,1 por ciento consume menos carne de ciertos animales y el 5,3 por ciento ha reducido su consumo de carne en general de manera considerable.
En abril, la Autoridad de Seguridad Alimentaria de Holanda ordenó retirar 50.000 toneladas de carne después de que fuera suministrada por una compañía comercial holandesa y vendida como carne de res por toda Europa desde enero de 2011, cuando en realidad pudo haber contenido carne de caballo.
La mitad de los encuestados dijo que quedaron impactaron por los escándalos. Sin embargo, la gran mayoría de la población holandesa dijo que no ve ninguna razón para cambiar sus hábitos alimenticios.
Al parecer las mujeres responden más enérgicamente a estos escándalos que los hombres, de acuerdo con la investigación. El ocho por ciento de las mujeres dijo que ahora consume menos carne, en comparación con sólo el tres por ciento de los hombres. Además, el 16 por ciento por las mujeres optó por la carne de animales criados con criterios especiales de seguridad, en comparación con el 8 por ciento de los hombres.
Una investigación anterior realizada por las Juntas Directivas de Productos de Ganado, Carne y Huevos (PVE) demostró que existe una tendencia a la reducción del consumo de carne en general. De acuerdo con las últimas cifras, un consumidor holandés promedio ingirió 82,4 kilogramos de carne en 2012, cuando en el 2000 el promedio fue todavía de 87 kilogramos por persona.