Un miembro de la etnia burití de Brasil murió hoy y tres más resultaron heridos en una operación policial para desalojar una hacienda en la ciudad de Sidrolandia, a 60 kilómetros de Campo Grande, capital del estado de Mato Grosso do Sul (sureste).
El Consejo Indigenista Misionero (Cimi) informó que la víctima es Osiel Gabriel, de 35 años, quien murió en el Hospital Beneficente Elmiria Silverio Barbosa, donde fue atendido por heridas de arma de fuego.
La Policía Federal brasileña admitió que sus agentes utilizaron armas de munición letal, tras ser recibidos "de forma violenta" por los indígenas cuando llegaron al local.
El enfrentamiento dejó tres indígenas heridos y a otros tres policías contusionados, uno de ellos rozado por un disparo en la oreja, explicó el superintentende de la Policía Federal en Mato Grosso do Sul, Edgar Paulo Marcon.
Tanto la Policía Federal como la militarizada llegaron la madrugada de este jueves al lugar para cumplir una orden judicial de desalojo y la reintegración de la tierra a su dueño, el ex diputado regional Ricardo Bacha.
Los indígenas ocuparon la hacienda desde el pasado 15 de mayo y llegaron a incendiar parte de ella, al alegar que se encuentra dentro de la "tierra Indígena de Burutí", declarada en 2010 como territorio de "ocupación tradicional".
La hacienda Marcon es una de las cuatro que ocuparon los indígenas, tres de las cuales ya fueron desocupadas.
Los indígenas demandan la aceleración del proceso de delimitación de tierras y se resiten a dejar de la zona.