El director de la Organización Mundial del Comercio (OMC), el brasileño Roberto Azevedo, aseguró este martes que el Gobierno brasileño tiene margen para modificar las normas existentes de la macroeconomía, como el control de la inflación, el superávit primario y los tipos de cambio.
"No es una cosa que se solucione moviendo una o dos fichas. La estructura de factores es grande e interactúa entre sí. Creo que el Gobierno brasileño tendrá que considerar hacerlo poco a poco", dijo Azevedo sobre el debate que hay en el país por la inflación y la actuación del Gobierno para evitarla.
El nuevo dirigente de la OMC se reunió con el presidente del Senado, Renan Calheiros, con quien habló sobre las perspectivas económicas
"Que vienen por delante", y resaltó la necesidad de que se adopten las medidas de competitividad y de flujo comercial que necesita Brasil para entrar definitivamente en la escena internacional.
Entre las medidas para dar mayor poder de competitividad, Azevedo citó las inversiones en infraestructura y en el ámbito de la regulación.
El embajador brasileño en la OMC aseguró en la posterior rueda de prensa que el Congreso ha trabajado para recuperar la industria nacional y garantizar una economía competitiva.
Azevedo citó entre los ejemplos la recién aprobada reforma portuaria. "Estas reglas son muy importantes para cualquiera que esté pensando en ser un participante activo en el comercio internacional, como lo es, inevitablemente, el caso de Brasil", señaló.