Un panel gubernamental japonés de asuntos de seguridad redactó hoy un proyecto sobre la nueva estrategia de seguridad nacional del país, enfocada en modificar su prohibición a las armas.
El proyecto dice que Japón debe contribuir a mejorar el ambiente de seguridad en la región de Asia Pacífico y prevenir contingencias que amenacen directamente al país a través del fortalecimiento de la alianza japonés-estadounidense y del impulso de la cooperación sustancial en seguridad.
Japón debe repensar su prohibición autoimpuesta al comercio de armas a fin de fortalecer la cooperación en el desarrollo de equipo de defensa con otros países, informó Kyodo News.
Bajo los principios de embargo de armas, Japón ha prohibido las ventas de armas a Estados comunistas, países sujetos a embargo por las resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y a naciones involucradas en conflictos internacionales.
Se espera que la estrategia sea aprobada para fines de este año, después de que los ministros correspondientes preparen los detalles, dice el informe. La estrategia, que podría abarcar el próximo decenio, tiene el objetivo de guiar las operaciones de una versión japonesa del Consejo de Seguridad Nacional estadoundiense cuando sea establecida, agrega el documento.
Después de llegar al poder, Abe ha expresado un fuerte deseo de reinterpretar la Constitución de Japón y levantar la prohibición al uso de la fuerza para solucionar las disputas internacionales. Muchos de los vecinos de Japón, especialmente los que sufrieron su brutal régimen colonialista durante la Segunda Guerra Mundial, temen que esa acción pueda alterar el equilibrio estratégico en Asia del Este y más allá.