El ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Luiz Alberto Figueiredo, viajó hoy a Washington para reunirse con la asesora de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Susan Rice, tras la divulgación de presuntos actos de espionaje del gobierno norteamericano en Brasil, informó la cancillería.
De acuerdo con información de la oficina de prensa de la cancillería, Figueiredo abordará con Rice el espionaje que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés) realizó contra la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y la petrolera estatal Petrobras, y que provocó la queja del gobierno sudamericano.
El canciller Figueiredo viajó hoy desde Ginebra, donde participó en la toma de posesión del brasileño Roberto Azevedo, como nuevo director de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Según la cancillería brasileña, la reunión de Figueiredo con Rice se pactó durante el encuentro privado que sostuvieron la semana pasada la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y su homólogo de Estados Unidos, Barack Obama, durante la cumbre del G20 en la ciudad rusa de San Petersburgo.
En esa ocasión, Obama se habría comprometido a dar explicaciones sobre los casos de espionaje antes del próximo miércoles.
El gobierno brasileño expresó públicamente su molestia e indignación, tras la divulgación en la red de televisión Globo de que la NSA habría espiado a Brasil en varias ocasiones, entre ellas a la estatal Petrobras, la mayor empresa del país.
Hoy mismo, la mandataria brasileña aseguró en una nota oficial que si esas actividades se confirman quedará probado que el objetivo estadounidense no era preservar la seguridad o combatir el terrorismo, sino que tenía objetivos "económicos y estratégicos".
Subrayó que de confirmarse la versión exigirá explicaciones al respecto, así como "medidas concretas que alejen de forma definitiva la posibilidad de espionaje que viole los derechos humanos, nuestra soberanía y nuestros intereses económicos".