La población cubana contará con mayores posibilidades de acceso a Internet en locales estatales a partir del 4 de junio próximo, cuando se abrirán 118 salas en todo el país.
Una resolución del ministerio de Comunicaciones publicada este martes en la Gaceta Oficial indica que los nuevos servicios de navegación en la red de redes se realizarán en cualquier unidad comercial de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (Etecsa) que tenga asociada una sala de acceso a Internet.
Según la Resolución 197, los interesados podrán obtener una cuenta para la navegación nacional por 60 centavos de CUC la hora, por 1.50 CUC si se trata de un correo electrónico y navegación nacional, y por 4.50 CUC si se quiere acceder a Internet con sus servicios.
El CUC es una moneda convertible cubana valorada casi a la par con el dólar (1 CUC equivale a 1.08 dólar).
Las nuevas salas de navegación se sumarán a las más de 200 que funcionan en hoteles de la nación caribeña.
La decisión es un "paso" para "acercar" el servicio a los ciudadanos, en correspondencia con la estrategia de facilitar el uso social de las nuevas tecnologías, señaló el documento.
Cuba se conectó a Internet en 1996 por vía satelital y desde entonces ha potenciado su uso de "manera social intensiva".
Las autoridades argumentan que la restricción del acceso a Internet responde a la política de bloqueo impuesta por Estados Unidos a la mayor de las Antillas desde 1962 para presionar por cambios políticos en la ínsula, lo que le impide usar los cables de fibra óptica que pasan a pocas millas de sus costas.
Ante las limitaciones tecnológicas y de comunicación impuestas por el cerco, La Habana recurrió a la conexión satelital, lo que limita sus comunicaciones porque dependen de una banda más estrecha y muy costosa.
Las prioridades de acceso han estado dirigidas a los sectores científicos, educacionales, sociales y empresariales, así como a médicos, investigadores, periodistas, intelectuales y artistas, entre otros profesionales.
Según cifras oficiales, Cuba tenía 1,8 millones de usuarios de Internet al cierre de 2010, con una tasa de conectividad de 159 por cada 1.000 habitantes, pero la mayoría sin acceso pleno a la red de redes, sino al correo y a una intranet nacional.
Hasta hoy, los cubanos han tenido la opción de conectarse en cibercafés estatales, a 1,8 dólares la hora pero sin navegación libre por la red, o en hoteles donde las tarjetas de Internet cuestan entre seis y 10 dólares la hora.
La instalación de un cable submarino de fibra óptica entre Venezuela y Cuba, que está operativo desde agosto de 2012, desató expectativas entre la población ante la posibilidad de comenzar la oferta de servicio privado de Internet.
Se afirmó entonces que la utilización del cable permitiría a Cuba multiplicar por 3.000 la velocidad de transmisión de datos, imágenes y voz, con un ancho de banda de 640 gigabytes y capacidad para 10 millones de transmisiones telefónicas simultáneas.
Etecsa precisó, sin embargo, que cuando concluyera el proceso de pruebas, la puesta en operación del cable submarino no significaría que de forma automática se multiplicarían las posibilidades de acceso.
"Será necesario ejecutar inversiones en la infraestructura interna de telecomunicaciones y aumentar los recursos en divisas, destinados a pagar el tráfico de Internet con el propósito de lograr el crecimiento paulatino de un servicio que brindamos hoy en su mayoría gratuitamente y con objetivos sociales", señaló la empresa.
El diario "Juventud Rebelde" subrayó este martes que "existe la firme intención de continuar acercando cada vez más estos servicios a las necesidades y posibilidades de la población".
Además de dar respuesta a la creciente demanda de acceso privado por parte de la población, está pendiente la lentitud de la conectividad que en ocasiones resulta extrema y dificulta la navegación.