Especialistas de España, Ecuador, Francia, Colombia, Costa Rica, Chile, Brasil y Perú participan en Santiago en el V Seminario Internacional "Prácticas públicas y privadas para reducir las huellas ambientales en el comercio internacional", que se prolongará hasta mañana viernes.
Al inaugurar el evento, Osvaldo Rosales, director de la División de Comercio Internacional e Integración de Comisión Económica para América Latina (CEPAL), dijo que desde 2009 se vienen realizando seminarios enfocados en la huella de carbono en el mencionado organismo.
Rosales añadió que el control de emisiones es un tema complejo entre los países, considerando que históricamente los combustibles fósiles fueron un recurso abundante y accesible, pero que tuvo impactos en el calentamiento global.
El directivo de la CEPAL explicó que ya "nadie sostiene que los mercados son eficientes y que se autorregulan", y que en términos ambientales los impactos han provocado una serie de desajustes climáticos en los últimos años, poniendo como ejemplo un alza en los tornados en Estados Unidos, entre otros.
Rosales recalcó que la huella de carbono no necesariamente debe verse como una amenaza, sino como una fuente de oportunidades competitivas. "Puede ser un cambio de paradigma en la gestión empresarial".
Por su parte, José Luis Samaniego, director de la División de Desarrollo Sostenible de CEPAL, afirmó que los cambios de los patrones de producción y consumo han pasado a ser un factor relevante para los Estados en los últimos años.
Samaniego se refirió al impacto de los etiquetados de los productos, que permite una mayor orientación al consumidor, al indicar que "herramientas como el etiquetado de carbono son bienvenidas".
En su opinión, la medición de la huella de carbono "es, por tanto, parte de un proceso mayor a nivel global".
En tanto, Pascal Delisle, el encargado de la cooperación de Francia para el Cono Sur latinoamericano, expresó que el etiquetado y el contar con una huella ambiental sana son medidas relevantes para avanzar hacia un mayor desarrollo sostenible.
Señaló que "el tema de la huella de carbono adquirió una real relevancia en Europa a finales de los años 2000", y destacó que los países industrializados han mejorado sus metodologías para medir la información relacionada con esta materia.
Además, la consultora de la CEPAL, Alicia Frohman, puso como ejemplo positivo un proyecto de geotermia en una zona rural de Guatemala, indicando que las "buenas prácticas" son iniciativas públicas y privadas relacionadas con la huella ambiental, que han tenido resultados positivos en mejorar la gestión ambiental y la sustentabilidad de los negocios.
Por su parte, Carlos Klink, secretario de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente de Brasil, presentó el tema "De la deforestación a una economía baja en carbono", argumentando que en los últimos 15 años en la Amazonia se declararon 250.000 kilómetros cuadrados de nuevas áreas protegidas.
También destacó que su país ha hecho esfuerzos en la protección de la Amazonia, atacando fuertemente la deforestación ilegal.
Explicó que los ejes han sido el monitoreo del bosque, reforzamiento de las leyes y sus aplicaciones, así como la restricción al crédito, entre otras acciones, recordando que las políticas de Brasil apuntan a reducir 36 por ciento sus emisiones de gases de efecto invernadero para 2020.