El Consejo de Seguridad de la ONU (CSNU) condenó hoy en términos enérgicos el asesinato de un elemento de mantenimiento de paz por parte de los rebeldes del M23 en la conflictiva parte oriental de la República Democrática del Congo.
"Los integrantes del Consejo de Seguridad condenaron en los términos más enérgicos los ataques perpetrados por el grupo rebelde M23 contra la Misión de Estabilización de la Organización de las Naciones Unidas (Monusco, por sus siglas en inglés) en Kivu del Norte, en el oriente de la República Democrática del Congo, los cuales provocaron la muerte de un elemento tanzano de mantenimiento de paz", se indicó en una declaración a la prensa emitida en la sede de la organización por el órgano de 15 países.
De acuerdo con la ONU, los ataques ocurrieron mientras Monusco apoyaba las acciones emprendidas por las fuerzas armadas congoleñas para proteger a los civiles del eje Kiwanja-Rutshuru, a 25 kilómetros al norte de Goma, capital de la provincia de Kivu del Norte.
En la declaración, los integrantes del CSNU expresaron su pésame a la familia del elemento muerto en el ataque, así como al gobierno de la República Unida de Tanzania y a Monusco.
Los integrantes del CSNU "también expresaron sus condolencias por la pérdida de vidas civiles en la República Democrática del Congo", se indicó en la declaración.
Además, el órgano más poderoso de la ONU pidió al gobierno de la República Democrática del Congo investigar con rapidez el incidente y llevar a los responsables ante la justicia.
"Los integrantes del Consejo de Seguridad reiteraron su apoyo total a la Monusco y pidieron a todas las partes cooperar plenamente con la misión", agregó la declaración.
Tras un periodo de calma de un mes, los enfrentamientos entre las fuerzas armadas congoleñas y el M23 estallaron el viernes por la mañana en la provincia de Kivu del Norte.
Los enfrentamientos se reanudaron apenas una semana después de la suspensión de las conversaciones de Kampala, capital de Uganda, entre el gobierno de la RDC y los rebeldes del M23 para encontrar una solución duradera a la crisis en la parte oriental del país.
En abril de 2012, el recién formado grupo rebelde M23 emprendió una insurgencia en la conflictiva región oriental del país y capturó Goma en noviembre antes de ser expulsado gracias a la presión regional para facilitar las conversaciones de paz.
El año pasado, los enfrentamientos continuaron de forma esporádica en el oriente de la RDC. Mediadas por Uganda, las conversaciones de paz entre el gobierno y los rebeldes se han estancado en repetidas ocasiones desde diciembre del año pasado.
A finales de marzo, el CSNU aprobó la creación de la primera fuerza de combate "ofensiva", con la intención de llevar a cabo operaciones especializadas para "neutralizar y desarmar" al M23, así como a otros rebeldes congoleños y a grupos armados extranjeros en el este del país.
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