El presidente peruano Ollanta Humala y los principales líderes políticos reafirmaron este lunes en Palacio de Gobierno la unidad nacional, frente a la sentencia que dictará la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para resolver la controversia, la cual puede darse a conocer el próximo mes.
En la reunión de Palacio de Gobierno participaron los ex presidentes Alan García (1985-1990 y 2005-2011) y Alejandro Toledo (2001-2006); el presidente del Congreso Víctor Isla; el presidente del Consejo de Ministros, Juan Jiménez; la canciller Eda Rivas; y los agentes del Estado por el litigio, embajadores Allan Wagner y José García Belaunde.
También estuvieron presentes los líderes de los partidos políticos Alianza por el Gran Cambio, Pedro Kuczinsky; Partido Popular Cristiano, Luis Bedoya; Solidaridad Nacional, Luis Castañeda; Somos Perú, Fernando Andrade; y Alianza por el Progreso, César Acuña.
También asistieron representantes de agrupaciones políticas con escaños en el Congreso Nacional, como la oficialista Gana Perú, Fuerza 2011, Partido Aprista Peruano y Perú Posible; embajadores y otros altos funcionarios gubernamentales.
A lo largo de la reunión en la sede de Palacio de Gobierno, que se inició a las 15:30 horas locales (20:30 GMT) y se prolongó por espacio de 105 minutos, se informó sobre el estado en que se encuentra la demanda por la delimitación marítima, presentada por Perú en enero de 2008, y los posibles escenarios en la sentencia de la CIJ.
Al término de la cita, el jefe de Estado y los asistentes posaron en el frontis del Palacio de Gobierno para los camarógrafos y reporteros gráficos, aunque no prestaron declaraciones a la prensa, salvo algunos que calificaron como "satisfactoria" la reunión.
Posteriormente, en declaraciones exclusivas al canal estatal RTP, la canciller Eda Rivas y el embajador Allan Wagner puntualizaron que en el encuentro se expusieron todas las posibilidades respecto al próximo fallo de la CIJ,.
De igual forma destacaron la importancia del apoyo y la unidad de todas las fuerzas políticas y de los peruanos en un tema crucial como la demanda de la demarcación marítima.
La postura de Lima es que la frontera marítima entre Perú y Chile no fue delimitada, razón por la cual apeló al derecho internacional ante la CIJ, al hacer entrega de la memoria escrita, con argumentos de hecho y derecho en 2008, la réplica en 2010 y en el alegato oral de 2012.
En el interín, dentro de esos plazos, Chile también hizo conocer su posición.
Perú reclama que la demarcación marítima debe ejecutarse desde el denominado Punto de la Concordia o Cero, como quedó fijado en la demarcación terrestre en 1929, y trazar una bisectriz.
Chile, por su parte, se opone al señalar que debe hacerse desde el Punto 1 y la línea debe ser paralela.
En ese trazado bisectriz, Perú considera que tiene derecho a un dominio marítimo adyacente desde sus costas, con lo cual reclama 38.000 kilómetros cuadrados de mar, que son considerados como soberanos por Chile, hasta una distancia de 200 millas marinas desde sus líneas de base.
Perú y Chile, a través de sus jefes de Estado y cancillerías, se han comprometido en repetidas oportunidades a respetar y ejecutar la sentencia que emita la CIJ de La Haya.
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