El grupo formado por IMX, empresa del multimillonario brasileño Eike Batista, la constructora Odebrecht y la compañía estadounidense AEG, se adjudicó la licitación para administrar el legendario estadio del Maracaná de Río de Janeiro, informó hoy el gobierno regional de Río.
Con el nombre de Consorcio Maracaná, el grupo fue el ganador del concurso público para administrar el "templo" del fútbol brasileño durante los próximos 35 años, ampliables por otros 35, a partir del próximo 2 de junio, fecha del primer partido oficial, divulgó hoy el gobierno de Río de Janeiro.
Liderada por Odebrecht (que tiene el 90 por ciento del grupo, por el cinco de IMX y cinco de AEG), el Consorcio Maracaná se impuso a su rival, formado por la constructora OAS, la compañía francesa Largadère Unlimited y la holandesa Stadion Amsterdam.
La propuesta económica del consorcio fue de 181,5 millones de reales (unos 90,7 millones de dólares) que serán pagados en 33 cuotas anuales.
El contrato contempla que el consorcio ganador tenga que sufragar unas obras calculadas en 594 millones de reales (unos 297 millones de dólares) que deben servir para construir un estacionamiento, áreas de entretenimiento y dos museos, uno dedicado al fútbol y otro al movimiento olímpico.
Además, tendrá que demoler varios edificios vecinos, entre ellos una escuela, una pista de atletismo y dos piscinas olímpicas, con el objetivo de aumentar el área de circulación de público entorno al recinto, lo que ha generado protestas de grupos sociales.
El estadio de Maracaná será reinaugurado oficialmente el próximo 2 de junio con un partido amistoso entre las selecciones de Brasil e Inglaterra, tras unas obras que empezaron en agosto de 2010.
El gobierno de Río de Janeiro ha invertido cerca de 1.120 millones de reales (unos 560 millones de dólares) en la reforma integral del estadio, inaugurado en 1950, para adecuarlo a las exigencias de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) para la organización del Mundial de fútbol de 2014, del que será sede de la final.
El mítico estadio brasileño recibirá siete partidos del Mundial, además de tres de la Copa Confederaciones del próximo junio,incluyendo el partido decisivo.
El Maracaná recibirá también las ceremonias de apertura y clausura de los Juegos Olímpicos de 2016 y será la principal sede de las pruebas de fútbol.
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