El presidente de Francia, Francois Hollande, dijo hoy que las empresas pagarán un impuesto de 75 por ciento calculado a partir de los salarios de sus empleados que superen el millón de euros (1,28 millones de dólares).
"En 2013, ahorraremos para no pedir al pueblo francés que haga más esfuerzos", dijo el presidente en una entrevista en el canal de televisión France 2.
En 2014, "no habrá ningún incremento más que el ya anunciado IVA y tampoco habrá nuevos impuestos", dijo el presidente.
Como propuesta de campaña, Hollande prometió un impuesto de 75 por ciento a los ingresos superiores a un millón de euros para financiar la lenta economía del país, pero la iniciativa fue rechazada por el consejo constitucional.
Por eso, en esta ocasión Hollande decidió cambiar esa iniciativa por una de impuestos a las compañías, con la esperanza de que las compañías recorten el salario ejecutivo durante dos años.