La embajada de Estados Unidos rechazó hoy que la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés) haya incurrido en "conducta inapropiada" en Bolivia, como argumentó el gobierno de Evo Morales para justificar la expulsión de ese organismo de Washington.
"Rechazamos expresamente cualquier sugerencia de que hubo conducta inapropiada. No hay ninguna prueba o razón para creer que hubo otras motivaciones (de las actividades de USAID) que no fueran el desarrollo y beneficio de Bolivia", indica una declaración pública leída por el encargado de negocios de la legación, Larry Memmott.
El documento también señala que Washington lamenta la decisión del gobierno de Morales "de poner fin a esta cooperación, que benefició a millones de bolivianos en el transcurso de las últimas cinco décadas", al decretarse la expulsión de la USAID.
Según la declaración leída esta mañana por Memmott, todas las actividades de la agencia estadounidense fueron coordinadas con el gobierno boliviano, como parte del Plan Nacional de Desarrollo.
El presidente Morales anunció el pasado 1 de mayo la expulsión de la USAID, tras acusar a la agencia de realizar labores encubiertas de desestabilización de su gobierno y como respuesta a que el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, declaró que América Latina es "el patio trasero" de su país.
Según Morales, esa medida se asumió para evitar que un organismo de Washington vuelva a utilizar y manipular a dirigentes campesinos con "limosnas" para afectar al gobierno.
Diez días después, la embajada de Estados Unidos en Bolivia efectuó un pronunciamiento público oficial contra esa disposición política del gobierno de Morales.
Las actividades de la USAID en Bolivia apoyaban el Plan Nacional de Desarrollo y estaban plenamente coordinadas con los ministerios y organismos del gobierno boliviano pertinentes, de manera oportuna y transparente, señaló la embajada.
"La ayuda brindada por Estados Unidos siempre ha sido un acto de solidaridad y amistad entre el pueblo estadounidense y el pueblo boliviano (...) Lamentamos la decisión del gobierno boliviano de poner fin a esta cooperación que benefició a millones de bolivianos en el transcurso de las últimas décadas", agregó.
La gran mayoría de los empleados de la USAID, sus socios y contratistas eran bolivianos, sostiene el documento.
"Estados Unidos lamenta profundamente el dolor y desconcierto que causa esta decisión", agregó la embajada en.
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