El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (CSNU) acordó hoy el despliegue de una fuerza de intervención para llevar a cabo acciones militares en contra de los grupos rebeldes en la República Democrática del Congo (RDC).
El consejo de 15 naciones adoptó de forma unánime una resolución que establece una "brigada de intervención" en el marco de la Misión de Estabilización de la ONU en la RDC (Monusco) "durante un periodo inicial de un año".
De acuerdo con la resolución, la fuerza de intervención será creada "con la responsabilidad de neutralizar a los grupos armados" y con "el objetivo de contribuir a reducir la amenaza representada por los grupos armados para la autoridad del Estado y la seguridad de los civiles en el oriente de la RDC, así como para abrir espacio para las actividades de estabilización".
La brigada de intervención consistirá de "tres batallones de infantería, uno de artillería y una fuerza especial y una compañía de reconocimiento, cuyos cuarteles estarán ubicados en Goma bajo el mando directo del comandante de fuerza de la Monusco", se indicó en la resolución.
Tras extender el mandato de la Monusco hasta el 31 de marzo de 2014, el Consejo de Seguridad la autorizó a "efectuar operaciones ofensivas específicas a través de la brigada de intervención ... ya sea unilateralmente o junto con el FARDC (el ejército nacional congoleño) ... para prevenir la expansión de todos los grupos armados, neutralizar esos grupos y desarmarlos".
La resolución también destaca que la fuerza de intervención será establecida "sobre una base excepcional y sin establecer un precedente o dañar los principios acordados del mantenimiento de la paz".
El 5 de marzo, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió al Consejo de Seguridad la autorización para el despliegue de una "brigada de intervención" en la RDC para abordar las amenazas inminentes a la paz y la seguridad.
En los últimos meses, el oriente de la RDC ha registrado enfrentamientos armados después de que el recién formado grupo rebelde M23 comenzara actividades insurgentes en la provincia de Kivu del Norte a comienzos de 2012.
Los rebeldes del grupo M23 se apoderaron de Goma, capital de la provincia de Kivu del Norte, antes de retirarse debido a la presión regional para facilitar las conversaciones a finales del año pasado.
El conflicto ha provocado el desplazamiento de más de 475.000 personas y ha forzado a otras 75.000 a huir a los países vecinos de Ruanda y Uganda.