Pekín, 30/07/2013(El Pueblo en Línea)-China ha decidido abrir la construcción y operación de los ferrocarriles a los inversionistas privados y comenzará a construir más líneas en las regiones occidentales económicamente atrasadas, una movida que impulsará al sector ferroviario, a la vez que dará rienda suelta a la vitalidad de la economía en general.
Una reunión ejecutiva del Consejo de Estado dijo el miércoles que se buscarían múltiples fuentes de recaudación de fondos para financiar la construcción de más ferrocarriles, incluyendo un papel más importante para el capital privado y un foco más grande en las regiones occidentales.
La medida proporciona un impulso a las provincias occidentales, en un momento en que el país acelera su reestructuración económica entre las diferentes regiones en pos de un desarrollo equilibrado e integral.
En particular, constituye un paso crucial para atraer más inversionistas privados en el sector ferroviario para cubrir el déficit de financiación e incrementar la eficiencia operativa de los ferrocarriles.
Es un gran avance para el sector en gran medida monopolizado por el Estado abrir los derechos de propiedad y gestión de los ferrocarriles interurbanos y locales a inversores privados. Y marca un paso más hacia las operaciones orientadas al mercado, tras la reforma del régimen de trenes en marzo, cuando la función administrativa del Ministerio de Ferrocarriles –ya desaparecido- se incorporó al Ministerio de Transportes y se constituyó la Empresa de Ferrocarriles de China (EFC).
El régimen monolítico del sector ferroviario, junto con la expansión acelerada de las costosas líneas de alta velocidad en los últimos años, generaron una grave presión financiera, que obligó al gobierno a acelerar la reforma.
Al final del primer trimestre, la EFC registró una deuda total de 2,84 billones de yuanes (460 mil millones de dólares), empujando su relación deuda/activos al 62,3 por ciento, de un 54,5 por ciento a finales del 2010.
Pero los expertos están divididos sobre la sostenibilidad operativa de la empresa dado su alto nivel de endeudamiento. La sociedad necesita con urgencia aumentar sus ganancias y reducir su nivel de deuda.
Fomentar la inversión no estatal es sin duda una buena opción. Teniendo en cuenta las experiencias pasadas, sin embargo, es demasiado pronto para predecir cualquier éxito.
En casos anteriores, muchos inversores privados se retiraron rápidamente de los proyectos ferroviarios locales, ya que no estaban satisfechos con el bajo nivel de rentabilidad, mientras que las autoridades ferroviarias no estaban dispuestas a conceder más beneficios comerciales.
Esta vez, la EFC debe asegurarse de que los inversores privados puedan obtener una ganancia razonable, para que más inversionistas potenciales puedan seguir el ejemplo y colaborar con el gigante sediento de efectivo.