Pekín, 30/07/2013(El Pueblo en Línea)-Sun Zhipei sólo ha estado en Helsinki durante cuatro meses, pero ya ha decidido que es allí donde él quiere establecerse.
El científico de nanotecnología de 35 años de edad previamente pasó casi 10 años viviendo en España y Gran Bretaña, y dijo que no pensaba en volver a su país natal, China.
“Puedo tener más control sobre lo que quiero estudiar aquí y llevar a cabo proyectos que me interesan”, dijo el profesor asociado de la Universidad de Aalto, quien obtuvo su doctorado en el Instituto de Física de la Academia China de Ciencias.
La actitud de Sun de alguna manera quizá va en línea con un informe que Pueblo en Línea publicó en junio, en donde decía que China está experimentando “la peor fuga de cerebros del mundo”.
Ochenta y siete por ciento de los mejores especialistas de ciencias e ingeniería de la parte continental que se fueron al extranjero para trabajar o estudiar no tienen planes de regresar, había dicho un funcionario no identificado del grupo de coordinación de especialistas del Partido al diario.
El grupo está formado por 20 agencias del Partido y del gobierno, como el Departamento de Organización del Comité Central del Partido Comunista de China, a cargo de recursos humanos.
Las solicitudes de China Daily para entrevistarse con alguien del departamento de organización no fueron respondidas.
Aunque los expertos y las estadísticas independientes no confirman la gravedad de la fuga de cerebros, no hay duda de que existe.
Wang Huiyao, director general del Centro para China y la Globalización, un instituto de investigaciones con sede en Pekín, dijo que desde la política de reforma y apertura de finales de 1970, 2,6 millones de estudiantes chinos estudiaron en el extranjero, de los cuales aproximadamente la mitad se dirigió a Estados Unidos.
Además, los EE.UU. son el destino número uno para muchos estudiantes chinos, dijo, con más de 190.000 en las universidades de ese país el año pasado.
Mientras tanto, datos del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. muestran que alrededor de 32.000 personas de la parte continental de China se naturalizaron ciudadanos estadounidenses el año pasado, mientras que 82.000 recibieron permisos de residencia permanente.
Cao Cong ha publicado varios ensayos y libros sobre la fuga de cerebros y es profesor asociado de ciencias sociales en la Universidad de Nottingham en el Reino Unido.
Se estima que el 90 por ciento de los estudiantes chinos que obtienen un doctorado en los EE.UU. deciden establecerse allí.
Pero, ¿por qué los mejores científicos e ingenieros de la parte continental de China son tan reacios a volver a casa?
“Las instituciones chinas tienen nuevos equipos de investigación, gran parte de ellos mejores que en algunos lugares en los EE.UU.”, dijo Joseph Jen, ex subsecretario de investigación, educación y economía del Departamento de Agricultura de EE.UU.
“Yo diría que la razón más importante por la que los buenos científicos chinos optan por quedarse en los EE.UU. se debe a la cultura científica... (según la cual) los científicos tienen mayores libertades para proseguir la investigación de su elección.
“En los EE.UU., los estudiantes de posgrado están capacitados para ser independientes e innovadores”, dijo el investigador de 74 años de edad, que nació en Chongqing, pero más tarde se estableció en los EE.UU., donde obtuvo un doctorado en bioquímica en la Universidad de California.
“En China, salvo algunas excepciones, los estudiantes son operadores de equipo, sin la oportunidad de desarrollar un pensamiento independiente y nuevas creaciones”, agregó.
Jen dijo que también cree que para conseguir los mejores puestos de trabajo en China aún se necesita de guanxi o buenas conexiones, lo cual no es el caso en los EE.UU..
Sin embargo, admitió que a pesar de que en EE.UU. hay ventajas materiales, “todavía existe discriminación racial, y muchos chinos-estadounidenses se molestan por eso”.
Chen Zhengyu, un estudiante de MBA en la Escuela de Negocios Judge de la Universidad de Cambridge, dijo que la mayoría de sus amigos chinos que son profesionales o científicos permanecen en el extranjero por la educación de sus hijos.
“Es un factor importante para que los padres chinos se instalen en Europa”, dijo, y agregó que mucha gente quiere una alternativa a un modelo centrado en los resultados de exámenes.
Grandes proyectos
En el marco del Plan de Desarrollo de Talentos a Mediano y Largo Plazo (2010-20), China planea atraer de nuevo a 2.000 de los mejores especialistas chinos, idealmente en los campos de la informática, la biotecnología, la industria aeroespacial, la protección del medio ambiente, la tecnología agrícola y el transporte.
Desde la década de 1990, el gobierno ha lanzado al menos siete grandes proyectos.
De 1990 a 2010, el Ministerio de Educación invirtió 600 millones de yuanes (98 millones de dólares) para proporcionar financiación inicial a más de 20.000 repatriados para realizar investigaciones científicas.
La Academia China de Ciencias (ACC) también puso en marcha un plan en 1994 para atraer a los científicos chinos en el extranjero, ofreciendo 2 millones de yuanes para la investigación. Hasta ahora ha atraído a 1.568 científicos de alto nivel de vuelta al país.
Pan Shilie decidió regresar en 2007 después de asistir a una feria de trabajo en Chicago, organizada por la ACC. En ese momento tenía tres años en un programa de investigación postdoctoral en la Universidad de Northwestern en los EE.UU..
“Cada año, los decanos de los centros de investigación adscritos a la ACC van a los EE.UU. y Europa a la caza de candidatos chinos en el extranjero”, dijo el hombre de 40 años de edad, quien es oriundo de la provincia de Henan. “Después de hablar con los empleadores, me di cuenta que la plataforma de investigación en China también es buena. Pero lo más importante es que sentí la sensación de pertenencia. Mi corazón nunca se estableció en el extranjero”, explicó.
Pan ha estado trabajando para el Instituto Técnico de Física y Química de Xinjiang de la ACC en los últimos seis años. Después de ser contratado a través del Programa de Cien Talentos, recibió 2 millones de yuanes, que incluís la financiación, y un subsidio de reubicación de 270.000 yuanes.
Aunque los ingresos y beneficios para los científicos en China aún están por detrás de los países occidentales, dijo que la brecha se está reduciendo. “China ha incrementado la inversión en investigación y desarrollo, mientras que la recesión económica en los EE.UU. y Europa significa que mis amigos en el extranjero se enfrentan a la presión de reducciones de fondos”, dijo.
En un discurso pronunciado en Pekín en junio, Zhan Wenlong, vicepresidente de la ACC, dijo que cada vez más científicos e investigadores chinos están regresando.
“El respeto, atención, confianza y ayuda para que puedan alcanzar su potencial de desarrollo son las misiones de nuestra academia”, dijo.
“Trabajamos para lograr la meta de construir un ecosistema de innovación al manejar el bosque que permite que los árboles crezcan en un suelo rico y con sol abundante”, agregó.
Zhan dijo que su academia también garantizará que las cuatro quintas partes del tiempo de los investigadores estarán dedicadas a la investigación.
El año pasado, la ACC lanzó un proyecto de políticas favorables para resolver las preocupaciones de los investigadores en materia de vivienda, seguro de salud y la vida familiar, como la educación de sus hijos y empleo para sus cónyuges.
Sin embargo, el nivel general de tecnología en China es todavía menor que en los EE.UU., los países de Europa occidental y Japón, dijo Gui Zhaoming, profesor del Instituto de Tecnología de Wuhan.
“Para los especialistas del extranjero que tienen la aspiración de ser empresarios en China, la falta de financiación es el obstáculo más grande”, dijo.
Se han puesto en marcha políticas financieras favorables para ayudar a que vuelvan los especialistas.
Los repatriados pueden disfrutar de una política fiscal preferencial del 15 por ciento si comienzan una empresa de alta tecnología. Sin embargo, el sistema de capital privado y de riesgo de China dificultan la iniciativa empresarial, ya que las regulaciones están poco desarrolladas y el sistema de crédito no está desarrollado completamente, dijo.
“Si no pueden conseguir inversiones, no pueden convertir sus ideas en un negocio”, dijo Gui. “Es por eso que no se atreven a volver”, sentenció.
Y trabajar en un entorno con gente de diferentes nacionalidades también es atractivo para algunos especialistas.
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