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Emigración mediante inversión sigue siendo popular para los chinos

Actualizado a las 24/07/2013 - 15:45
En los últimos años, la emigración mediante inversión se ha vuelto cada vez más popular. ¿Por qué tantos ricos quieren emigrar? A los extranjeros, a fin de cuentas, ¿qué es lo que les gusta más: los chinos o su dinero? ¿Cuán remoto es el camino de emigración que deben recorrer estos chinos aventureros?
Palabras clave:popular,inversión,Emigración
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En los últimos años, la emigración mediante inversión se ha vuelto cada vez más popular. ¿Por qué tantos ricos quieren emigrar? A los extranjeros, a fin de cuentas, ¿qué es lo que les gusta más: los chinos o su dinero? ¿Cuán remoto es el camino de emigración que deben recorrer estos chinos aventureros?

La educación de los hijos es el motivo más importante

Zhong Nan, gerente del departamento de mercadeo de la Agencia de Emigración mediante Inversión de Shenyang, dijo: “Cada día más ricos cuya fortuna supera los 10 millones de yuanes tienden a emigrar al extranjero por medio de la inversión, además, el ritmo de crecimiento es más rápido. Sólo en Shenyang, nuestra compañía tiene cada año más de 100 clientes. La cantidad de dinero para invertir es diferente, oscilando entre unos millones de yuanes y más de 10 millones de yuanes. La mayoría de los clientes nacieron en la década de 1970, de modo que el motivo más importante para emigrar es la educación de sus hijos”.

En nuestro país, los ciudadanos correspondientes a las condiciones arriba mencionadas generalmente ya han conseguido un buen ingreso y estatus social, por lo que el bienestar no es lo que buscan. Emigran al extranjero no para mejorar sus condiciones de vida, sino para comprar a coste de su riqueza un ambiente cómodo y seguro para el crecimiento de sus hijos, un ambiente educativo relajado en el que sus hijos puedan evitar la competencia intensa y la presión de los exámenes dentro del país.

Chen Lei, natural de Shenyang y en proceso de tramitar su inmigración a Canadá, dijo: “Viajé allí una vez y siento que el medio ambiente allí es muy bueno. Lo que no imaginaba es que iría a vivir allí por (el bien de) mi hijo”. Su marido es el presidente ejecutivo de una compañía de software, a quien le ha ido muy bien en el país. Sin embargo, desde 2010, año en que nació su bebé, empezó a planear la emigración junto con su marido. Según Chen Lei, “la calidad del aire y la seguridad de los alimentos, entre otras cosas, no son muy buenas y lo más importante es que los niños tienen que enfrentar grandes presiones desde muy pequeños. El sistema educativo del país frena en cierto grado el desarrollo de los niños, por lo que quiero que mi hijo viva en un lugar donde hay paisajes pintorescos y poca presión en el estudio. Así me parece que Canadá es más propicio para él”.

La mitad de los emigrantes opta por países pequeños

Zhong Nan dijo: “En cuanto a emigrar a los países que llevan siendo destinos populares desde hace mucho tiempo, es difícil lograr el permiso y los trámites son complicados además de un largo periodo de espera, por lo que los emigrantes fijan la mirada en países pequeños donde los trámites son simples y se necesita menos dinero de inversión, como Letonia, Malasia, Portugal y Corea del Sur, entre otros nuevos países populares para la inmigración. Los que se deciden emigrar a los países arriba mencionados ya ocupan el 50% de todos los clientes de la compañía”.

Según el gerente Ding del departamento de mercadeo de una agencia, “a causa de que en los últimos años los países europeos se están enfrentando a un decaimiento económico, en muchos países pequeños las compañías de bienes raíces están a punto de declararse en bancarrota, por lo que los países europeos abren sus puertas a los inmigrantes que quieran invertir. Por ejemplo, la política de ‘ciudadanía por compra de una casa’ es muy atractiva”.

Comprar una casa para establecerse es una tradición para los chinos, por lo que los emigrantes no quieren vivir en el extranjero sin una casa propia. Al mismo tiempo, en Europa, junto con la vivienda se venden no sólo el derecho de utilización sino también su propiedad, política que a los inversores les gusta más. Si tomamos el ejemplo del mercado inmobiliario en las grandes ciudades de China veremos que con 500 mil euros, se puede comprar sólo una casa de más de cien metros cuadrados de superficie, sin decoración de primera y con derecho de utilización por 70 años. Sin embargo, en Europa, con 250 mil euros, se puede comprar un chalet de más de 300 metros cuadrados de superficie, con decoración sofisticada y todos los muebles necesarios. Además, se puede heredar la propiedad a sus descendentes y se puede obtener al mismo tiempo el permiso de residencia permanente de los países de la Unión Europea que permite la migración de toda la familia resultando a la vez el problema de mantener a los ancianos mientras se ayuda a enviar a los hijos a estudiar en institutos y universidades famosas de Europa. Tales condiciones de migración son verdaderamente atractivas.

En Grecia, al comprar una propiedad de más de 250 mil euros, se puede obtener un permiso de residencia de 5 años. En España, si se compran bonos de la deuda nacional o una propiedad, los extranjeros pueden conseguir el permiso de residencia. En Portugal, al comprar una propiedad de más de 500 mil euros, se terminan todos los trámites en 24 horas y, con tan sólo vivir en la vivienda 7 días al año, se puede obtener el permiso de residencia permanente en el país.

La emigración por inversión también es una “fuga de cerebros”

En los últimos años, hay muchos ricos y personas talentosas que han emigrado al extranjero. Según estadísticas, en 2007, unos 270 ciudadanos chinos solicitaron visados de inversión para emigrar a Estados Unidos, de los cuales 161 lograron obtenerlos. Sin embargo, hasta 2011, el número de los solicitantes aumentó 10 veces y más de la mitad logró la autorización. De acuerdo con la investigación, de los ricos con fortunas de más de 100 millones de yuanes, un 40% quiere emigrar a EE.UU., un 37% a Canadá, un 14% a Singapur y un 11% a Europa. Según estadísticas recién publicadas por el Buró de Servicios de Inmigración de EE.UU, las tres cuartas partes de todos los inmigrantes por inversión este año son chinos.

Mientras haya más ricos, habrá más fugas de personas cualificadas y fortunas al extranjero.

Qin Ling, profesor del instituto de demografía de la Universidad de Liaoning, dijo: “Los que pueden emigrar al extranjero son seguramente personas capaces que los países extranjeros necesitan, pero nuestro país necesita aún más. Podemos ganar de nuevo el dinero invertido, pero es difícil recuperar a las personas talentosas. Gracias al rápido desarrollo económico de China en los últimos años, algunos estudiantes en el extranjero han optado por volver al país para comenzar una empresa. Los graduados retornados del extranjero han formado un grupo impresionante de emprendedores. Tando la emigración como el retorno se han convertido recientemente en el nuevo carácter de la circulación de personas cualificadas. No obstante, los que perdemos son básicamente personas de la élite y el fenómeno no se llega a compensar con los retornos. La cantidad absoluta de estudiantes retornados del extranjero sigue aumentando, pero la cantidad relativa se está reduciendo de manera evidente”.

Mientras tanto, en opiniones de algunos expertos, aunque vayan al extranjero, los talentos chinos siguen permaneciendo a la clase de personas cualificadas de esos países, por lo que cada día más chinos pertenecen a la clase media e incluso alta de los campos económico y tecnológico de países extranjeros, lo cual también ayuda a promover el desarrollo económico y político de nuestro país.

China está en una etapa en la que necesita a esas personas, por eso, cómo retener a los talentos es un problema difícil de resolver. Qin Ling dijo: “Para que el dinero se quede, primero se tiene que quedar la gente y para que se quede la gente, primero hay que prestarle atención. Tenemos que mejorar aún más la economía de mercado, para que sea más justo obtener recursos mientras se mantiene un espíritu empresarial. De hecho, mucha gente se enfrenta a un dilema, es decir, sabe que China es el país con el desarrollo más rápido del mundo en el presente, pero no se siente segura; quiere desarrollarse en el tramo superior de la industria, por lo que invierte en finanzas y energía entre otras industrias que no están totalmente abiertas. Tenemos que convertir la injusticia en justicia, mientras cambiamos la inseguridad en seguridad. Al mismo tiempo, emigrar al extranjero no significa hacer ruptura con la patria. Muchos emigrantes mantienen contactos de negocios con China, lo que impulsa el mejoramiento del ambiente en el país”.

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