KINSHASA, 15 jul (Xinhua) -- La ronda más reciente de enfrentamientos en el este de la República Democrática del Congo ha causado más de 100 víctimas, en su mayoría rebeldes del movimiento 23 de Marzo (M23), de acuerdo con el gobierno.
La cifra de víctimas fue dada a conocer después de que el ejército declarara hoy que los rebeldes fueron expulsados de Mutaho, no muy lejos de la capital provincial Goma, pero un vocero del M23 desmintió la información.
"La situación está bajo nuestro control en Mutaho, al igual que toda la línea fronteriza", dijo a Xinhua un vocero militar que se identificó como el coronel Hamuli.
"Nuestro objetivo es hacer que el enemigo se repliegue tanto como sea posible de la ciudad de Goma", agregó.
Por su parte, el vocero del M23, Amani Kabasha, desmintió la información del gobierno y dijo que "no hemos perdido ninguna posición en Mutaho".
La ofensiva iniciada por los rebeldes el domingo por la tarde contra Mutaho representa una gran amenaza para Goma, que fue controlada brevemente por el M23 en noviembre de 2012.
"Los terroristas de M23 atacaron nuestras posiciones en Mutaho y tomamos represalias", dijo un oficial de las FARDC a Xinhua por teléfono.
"Ahora decidimos combatir contra ellos y expulsarlos porque esto es demasiado", añadió.
Por su parte, un miembro del M23 dijo a Xinhua por teléfono que "no tenemos más opción que defendernos. Las FARDC y sus aliados el Mai Mai Nyatura y las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) atacaron nuestras posiciones en Mutaho".
El 20 de mayo, las dos partes se enfrentaron en la misma localidad con un saldo de 15 rebeldes muertos y 21 lesionados, mientras que de lado de las FARDC, cuatro soldados perdieron la vida y seis resultaron heridos, dijo el vocero del gobierno, Lambert Mende.
Esta es la primera confrontación entre las FARDC y el M23 desde la reanudación de las conversaciones de Kampala tras el enfrentamiento del 20 al 22 de mayo.
El M23 surgió en abril de 2012 integrado por soldados rebeldes que anteriormente habían sido rebeldes pero que se integraron a las FARDC. Los ex soldados dijeron que su levantamiento fue en respuesta al incumplimiento gubernamental de un acuerdo de paz firmado el 23 de marzo de 2009.