Más de 1.000 manifestantes turcos rechazaron hoy la propuesta de referendo presentada por el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, sobre el futuro del Parque Gezi de Estambul.
Los manifestantes desafiaron las advertencias de las autoridades turcas para dispersarse del parque en la Plaza Taksim y anunciaron su intención de permanecer en el lugar hasta que se tomen "medidas concretas" para satisfacer sus demandas.
Can Atalay, vocero de la Plataforma de Solidaridad con Taksim, que organiza las manifestaciones antigubernamentales, dijo que "seguiremos en el Parque Gezi como el primer día en que nos reunimos, con nuestras canciones, libros, tiendas de campaña, bolsas de dormir y todas nuestras demandas".
"El Parque Gezi es vida. Seguiremos defendiendo nuestros derechos vitales en todas partes y bajo cualquier circunstancia", dijo el vocero.
Atalay observó que "el tribunal ya había suspendido la construcción de cuarteles históricos en el lugar" y dijo que "en condiciones normales, la satisfacción de nuestras demandas es el deber que el gobierno tiene con sus ciudadanos".
Sin embargo, los manifestantes dijeron que la discusión sobre el referendo fue un avance tras las redadas policíacas y agregaron que "consideramos que el fin de las amenazas del gobierno y la apertura de una discusión sobre un referendo son un avance y una promesa de que no habrá más víctimas".
"Pero desafortunadamente observamos que el lenguaje amenazante se encuentra todavía presente en las declaraciones del primer ministro o del vocero", dijeron los manifestantes que insisten en que sus demandas de mantener intacto el Parque Gezi y de investigar a los responsables de la dura represión policíaca y de las pérdidas de vidas, son legales y legítimas.
Los líderes de las manifestaciones presentaron la semana pasada seis demandas al gobierno durante una reunión, incluyendo la prohibición o restricciones severas al uso del gas lacrimógeno y el despido de los funcionarios involucrados en las violentas medidas tomadas en su contra, en especial durante el primer día de las protestas.
Hoy con anterioridad, el ministro del Interior, Muammer Guler, hizo una advertencia a los manifestantes que participan en los disturbios antigubernamentales y dijo que la actual situación en el Parque Gezi "no puede continuar de esta manera".
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