El gobierno iraquí dijo hoy que rechaza el retiro de los combatientes kurdos de Turquía y su instalación en Irak y describió a su ingreso como una "flagrante violación a la soberanía del país".
"El gobierno iraquí confirma su rechazo al retiro y la presencia de los militantes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) hacia el territorio iraquí, lo que es considerado como una violación flagrante a la soberanía e independencia de Irak", señaló el gabinete de Irak en un comunicado.
El gabinete agrega que el Ministerio de Relaciones Exteriores iraquí presentará una queja ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para evitar la violación a la soberanía iraquí. Además, entregará memorandums de la objeción de Irak al gobienro turco, a la Liga Arabe y a la Organización de Cooperación Islámica.
La acción de Bagdad tiene lugar horas después de que el primer grupo de militantes del PKK, que se retiraron de Turquía, entró en la región de Kurdistán de Irak esta mañana.
Los combatientes del PKK comenzaron el retiro hacia su bastión en Irak luego de que su líder encarcelado, Abdullah Ocalan, declarara una tregua con las tropas kurdas.
Los medios de comunicación turcos informaron hace una semana que alrededor de 2.000 militantes comenzarían a salir de Turquía desde el 8 de mayo, viajando por la zona fronteriza montañosa a su base en las montañas Kandil en el norte de Irak.
Al dar la bienvenida a la solución pacífica al problema kurdo en Turquía, Irak rechazó el jueves la presencia de los combatientes armados en sus territorios y dijo que su entrada "podrá debilitar la seguridad y estabilidad de Irak y de sus países vecinos".
Ankara había estado sosteniendo negocaciones de paz con Ocalan desde octubre pasado. El 21 de marzo, Ocalan finalmente hizo el anuncio de una tregua y retiro, a lo que su grupo militante respondió positivamente.