La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, agradeció hoy a los gobiernos que apoyaron la candidatura del embajador brasileño Roberto Azevedo, quien fue elegido hoy como nuevo director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
En una nota oficial, Rousseff afirmó que Azevedo podrá llevar a la organización a un orden económico mundial "más dinámico y justo".
"El gobierno brasileño recibe con satisfacción la elección del embajador Roberto Azevedo para director general de la Organización Mundial de Comercio", señaló la presidenta.
El gobierno brasileño fue informado esta tarde de la decisión en una comunicación informal, como era previsto, puesto que el anuncio oficial deberá ser hecho mañana miércoles en Ginebra, en la sede de la OMC.
"Aún sufriendo los efectos de la crisis mundial iniciada en 2008, estará en la OMC, en los próximos años, dar un nuevo, equilibrado y vigoroso impulso al comercio mundial, fundamental para que la economía global entre en nuevo período de crecimiento y justicia social", afirmó Rousseff.
Según la gobernante brasileña, al presentar el nombre de Azevedo para la función, Brasil tenía claro que "por su experiencia y compromiso, él podría conducir la Organización en la dirección de un ordenamiento económico mundial más dinámico y justo".
"Ese mensaje fue entendido por una expresiva mayoría y, por esa razón, agradezco el apoyo que nuestro candidato recibió de gobiernos de todo el mundo en las tres rondas de votación. Esa no es una victoria de Brasil, ni de un grupo de países, sino de la Organización Mundial de Comercio", enfatizó.
Azevedo asumirá el 1 de septiembre el cargo que es ocupado todavía por el francés Pascal Lamy, y se convertirá en el primer latinoamericano en dirigir la entidad multilateral.
La OMC vive un momento crítico debido a las dificultades para desbloquear las negociaciones de la ronda de Doha, propuesta para liberalizar el sistema multilateral de comercio sin avances desde hace cinco años.
A pesar de los pronósticos negativos, Azevedo venció al candidato mexicano Herminio Blanco, quien tenía el apoyo de Estados Unidos y de los países de la Unión Europea.
El brasileño, por su parte, contó con el apoyo del grupo BRICS -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica-, además de los países de lengua portuguesa y de varias naciones de América Latina, Asia y Africa.
De acuerdo con los especialistas, uno de los factores que inclinó la balanza en favor de Azevedo fue que recogió votos de todos los continentes.
Jefe de la delegación brasileña en las negociaciones de la ronda de Doha y representante permanente ante la OMC, el nuevo presidente del órgano multilateral fue jefe del Departamento Económico de Itamaraty, la cancillería brasileña, en 2005 y 2006.
Azevedo, de 55 años, representaba además a Brasil en la Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI), el Consejo de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (Unctad) y la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT).