El gobierno uruguayo firmó hoy un contrato con la empresa francesa GDF Suez, que se encargará de construir una planta regasificadora en el oeste de Montevideo, la cual operaría a partir de 2015.
Roberto Kreimerman, ministro de Industria y Energía, dijo que la regasificadora representa un "hito en la estrategia energética" del país, ya que disminuirá su vulnerabilidad y los costos de producción.
La obra, que estará enclavada en una terminal marítima sobre el Río de la Plata, tendrá un costo de 1.125 millones de dólares estadounidenses.
Las autoridades del consorcio Gas de Sayago, conformado por la compañía estatal de energía UTE y la petrolera ANCAP, suscribieron un contrato por 15 años, que incluye un aval del gobierno a GDF Suez para facilitar el financiamiento del proyecto.
La planta tendrá una capacidad de regasificación de 10 millones de metros cúbicos por día, expandible a 15 millones, y de almacenamiento a largo plazo de 263.000 metros cúbicos.
Para el vicepresidente de GDF-Suez, Jean Francois Cirelli, la terminal implica "un desafío desde la ingeniería".
"Junto a todas las partes hemos desarrollado un proyecto que constituye una innovación tecnológica", afirmó, y subrayó que "será la primera vez que se use un buque de este tamaño para almacenaje y regasificación".
Kreimerman resaltó que este proyecto servirá para "complementar nuestra energía eléctrica, pero también la capacidad de realización de nuestra gente".
La planta se encargará de la "recepción, almacenamiento y regasificación de gas natural licuado".
La firma del contrato tuvo lugar esta tarde en la Torre Ejecutiva, sede presidencial, con la presencia del mandatario José Mujica.
Si bien la propuesta de GDF Suez era la más cara en el proceso de licitación internacional, fue la que tenía mayor respaldo técnico, dijo Gas Sayago al adjudicarle la obra en mayo pasado.
Hasta el momento, Uruguay carece de hidrocarburos y debe importarlos.