NACIONES UNIDAS, 18 abr (Xinhua) -- El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) expresó hoy su indignación por los recientes ataques armados contra civiles refugiados en una base de la ONU en Sudán del Sur y e hizo un llamado al gobierno sursudanés para que "presente a los responsables de este atroz acto ante la justicia".
El consejo expresó "su indignación por los recientes ataques de grupos armados en Sudán del Sur que deliberadamente atacaron a civiles, así como los sitios y al personal de la Misión de la ONU en Sudán del Sur (Unmiss, por sus siglas en inglés). En particular el ataque del 17 de abril en contra de las instalaciones de Unmiss en Bor que tuvieron como resultado decenas de muertos y heridos, incluyendo a quienes buscaban refugio y protección de la ONU, y los ataques del 14 de abril en Bentiu y en el estado de Unity", se indicó en una declaración de las 15 naciones del consejo para la prensa.
Los miembros del consejo también condenan en los términos más enérgicos estas acciones y subrayan que los ataques contra civiles y elementos de mantenimiento de paz podrían constituir un crimen de guerra.
Grupos armados utilizaron el jueves lanzagranadas para atacar la base de la ONU, en donde 5.000 personas se encuentran refugiadas. Al menos 20 personas murieron y 70 más resultaron heridas, se indicó en informes.
El consejo hizo un llamado al gobierno de Sudán del Sur para que tome medidas inmediatas para garantizar la seguridad de todos los civiles y de los sitios de Protección de Civiles de Unmiss en Sudán del Sur, para que investigue con rapidez estos incidentes y para que presente a los responsables de este atroz acto ante la justicia, se indicó en la declaración.
El consejo también ofreció sus condolencias a los familiares de los civiles heridos y muertos en estos ataques y exhortó a las dos partes a permitir a Unmiss cumplir plenamente su mandato.
"Los miembros del Consejo de Seguridad destacan su pleno apoyo a los elementos de paz de Unmiss y elogian las acciones de los contingentes de Unmiss en Bor porque buscaron cumplir su mandato de proteger a los civiles", se indicó en la declaración. También hicieron un llamado a todas las partes para que se abstengan de acciones o declaraciones que puedan agravar más la situación.
La violencia que ha azotado a Sudán del Sur desde mediados de diciembre de 2013 ha dejado miles de muertos y ha obligado a cerca de un millón de personas a abandonar sus hogares, luego de que comenzaron los enfrentamientos en Juba, la capital, entre soldados leales al presidente Salva Kiir y las fuerzas que apoyan al ex vicepresidente Riek Machar.
Unmiss abrió sus puestas en ocho de sus bases en el país a quienes buscaban huir de los ataques, los cuales han adquirido un creciente tono étnico. A cuatro meses del conflicto, Unmiss alberga a cerca de 67.000 civiles en sus bases.
El teléfono móvil cumple 40 años
Viaje por China: cada día más fuera del alcance
Contacto
Twitter
Facebook
RSS
Imprimir
Favorito
Corregir
e-mail
