El gobierno de Somalia pidió hoy la cooperación regional para combatir la creciente amenaza de los grupos terroristas, luego del letal ataque aún en curso contra un centro comercial de Nairobi, capital de Kenia.
El presidente del parlamento somalí y ex presidente provisional del país, Mohamed Osman Jawari, dijo que el ataque contra el centro comercial Westgate destaca la importancia de la colaboración de los gobiernos de la región con el fin de alcanzar una "paz sostenible".
"Tenemos que trabajar juntos y encontrar un enfoque común para enfrentar el flagelo de la violencia", indicó Jawari en una declaración.
La alta dirigencia somalí condenó el ataque ahora en curso contra un exclusivo centro comercial de Nairobi que el grupo militante somalí Al-Shabaab se adjudicó.
El Ministerio del Interior de Kenia dijo que se ha confirmado la muerte de 62 personas y que otras 175 han resultado heridas desde que los militantes vinculados a Al Qaeda comenzaron el sábado el ataque contra el centro comercial.
Kenia ha estado experimentando inseguridad desde octubre de 2011, fecha en que envió sus tropas al otro lado de la frontera, al territorio sureño de Somalia, para enfrentarse a los combatientes rebeldes militantes de Al-Shabaab.
Las tropas kenianas, en respaldo de las fuerzas somalíes, expulsaron al grupo militante de su principal bastión en la estratégica ciudad portuaria de Kismayo, en el sur de Somalia, y de otras áreas clave.
Kenia acusó al grupo somalí afiliado a Al Qaeda de provocar un estado de inseguridad luego de llevar a cabo el secuestro de turistas extranjeros dentro de Kenia. La frontera común entre los dos países del este de Africa se encuentra en gran medida desprotegida y es porosa.