El ministro australiano de Innovación, Industria, Ciencia e Investigación, Kim Carr, presentó el jueves la Insignia Bioseguridad del organismo nacional científico CSIRO del país, con el fin de ayudar a proteger al medioambiente, al sector agrícola y a la población de amenazas biológicas.
"Históricamente, el aislamiento geográfico de Australia nos ha salvado de algunos de los impactos más serios de pestes y enfermedades exóticas que circulan por el mundo", dijo Carr.
"Sin embargo, no podemos permitirnos ser complacientes. Contar con un fuerte sistema de bioseguridad apoyado por ciencia e investigación de clase mundial es cada vez más importante a medida que nuestra conexión con el resto del mundo crece a través del comercio y la gente", añadió.
Carr dijo que las enfermedades, hierbas, animales e insectos invasivos, que no respetan las fronteras, pueden devastar cultivos, ganados, el medioambiente único del país e incluso la salud humana.
"La nueva Insignia Bioseguridad propone una perspectiva y un enfoque nacionales sobre la ciencia necesaria para tratar los principales desafíos de bioseguridad que enfrenta nuestro país".