Por Liu Jiang, Zhang Wei
BRUSELAS, 30 abr (Xinhua) -- Las recientes visitas a Beijing realizadas por el presidente francés, Francois Hollande, y la Alta Representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton, han vuelto a convertir las relaciones entre China y la UE en el cetro de atención.
China y la UE son socios no rivales y su cooperación es mutuamente beneficiosa, dijeron funcionarios y analistas.
Primero, China necesita gerencia y tecnología avanzada de los países desarrollados para satisfacer sus necesidades y conseguir la industrialización, la informatización, la urbanización y la modernización agrícola.
Para una UE cargada de deudas, es una buena manera de explorar los mercados extranjeros para acabar con el crecimiento lento. A cambio, la recuperación de la economía de la UE ofrecerá a China un nuevo ímpetu y un entorno extranjero sano.
Segundo, el desarrollo entre China y la UE contribuirá a la creación y a la mejora de un modelo de desarrollo que combine la eficiencia de los mercados con la igualdad social, lo que ayudará a conseguir un orden económico mundial más racional y equilibrado.
Tercero, profundizar la asociación de cooperación estratégica entre las dos partes es propicio para solventar los principales problemas globales, tales como la no proliferación, la seguridad energética y el cambio climático.
Como dijo Ashton en una entrevista con Xinhua, "la UE está convencida de la importancia de mejorar la relación entre China y la UE para enfrentar los retos globales y para seguir siendo una fuente principal de prosperidad para todos".
El sistema global está fluctuando con la transición entre el viejo orden y el nuevo, y el camino hacia un mundo políticamente multipolar y económicamente integrado no es un camino llano.
Por esto, China y la UE ambos principales jugadores en la arena internacional, necesitan mejora su cooperación en eventos importantes, y con esto ayudar a traer a las diferentes partes involucradas en disputas a la mesa de negociaciones.
Este año marcará el 10º aniversario del establecimiento de la asociación estratégica integral entre China y la UE, lo que lo convierte en una ocasión propicia para profundizar la cooperación conjunta y enfrentarse a los retos de la globalización y promover el desarrollo del mundo.