Un informe del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) señaló que la atención médica para los refugiados sirios en los países circundantes resulta cada vez más difícil por la falta de recursos, dijo hoy la Acnur.
En un informe que revisa la situación de atención médica de los refugiados durante los tres primeros meses del 2013 en Irak, Jordania y Líbano, el vocero de la Acnur, Adrian Edwards, dice que los refugiados sirios requieren tratamiento para sus heridas, enfermedades psicológicas, enfermedades transmisibles y padecimientos crónicos de más largo plazo tales como la diabetes y atención especializada.
Edwards agregó que con más de 1,4 millones de refugiados en la región hasta ahora, se está volviendo cada vez más difícil para los refugiados sirios tener acceso a atención médica de calidad en medio del déficit presupuestal, en particular para aquellos que viven fuera de los campamentos. El número de personas que necesita someterse a una evaluación médica va en aumento, lo que ejerce presión sobre los servicios de salud existentes.
"Ambos temas son motivo de grave preocupación para nosotros. Junto con nuestos socios, seguimos proporcionando atención médica a los refugiados sirios en los campamentos de Jordania e Irak", dijo Edwards.
La escasez de recursos que la Acnur y las agencias asociadas enfrentan en Líbano los ha obligado a reducir su apoyo tanto para la atención médica básica como para la especializada en ese país.
De conformidad con el actual plan regional de respuesta a los refugiados, alrededor de 55 por ciento de los fondos han sido recibidos hasta ahora por la Acnur. Los donadores presentarán un plan actualizado a finales de mayo.