QUITO, 29 abr (Xinhua) -- El gobierno de Ecuador insistirá en su pedido a la Unión Europea (UE) que elimine el requisito de visado para sus ciudadanos, dijo este martes el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño.
"Hemos considerado que es absolutamente legítimo, incluso, en términos del desarrollo actual de nuestro país y el desarrollo actual de Europa", dijo el jefe de la diplomacia ecuatoriana al canal público Ecuador TV.
Patiño, sostuvo que el tema "va a tomar tiempo" e insistió que en que Ecuador va a plantear "con todo derecho que los ecuatorianos no tengamos visa".
La eliminación de la visa fue solicitada por el presidente Rafael Correa, a su colega de España, Mariano Rajoy, durante una visita a ese país la semana pasada como parte de una gira por Europa.
Entonces, el mandatario ecuatoriano afirmó que actualmente no existe justificación para exigir la visa a sus compatriotas y objetó que ese requisito se haya retirado para Colombia y Perú.
"Con todo respeto a Colombia y Perú, la migración en la región la generan Colombia y Perú, porque nuestros salarios son más altos", afirmó.
Además, destacó que el flujo migratorio se ha revertido ya que ahora también llegan a Ecuador ciudadanos españoles, italianos y norteamericanos.
El canciller ecuatoriano coincidió con Correa en que las circunstancias actuales son distintas a las de 2003, que llevaron a la UE a imponer el visado a los ecuatorianos ante una fuerte migración.
"Europa dijo: hay que parar un poco la cosa, va a ser incontrolable, pero ahora, ya no es así. La tendencia ha sido revertida, ahora regresan muchos ecuatorianos, y por otro lado, vienen europeos acá (Ecuador)", apuntó.
"Así es que tenemos toda la razón para solicitar que los ecuatorianos sea exentos de una visa para visitar, para hacer turismo, o para reintegrarse en las familias que están viviendo allá (Europa)", agregó el canciller.
Quito, que promueve la libre movilidad de las personas, no exige visa para los migrantes del bloque europeo, por lo que apela también a la reciprocidad en este tema.
En 2008, el país andino eliminó el visado para los turistas, pero en 2010 restableció el requisito para los ciudadanos de una decena de países de África y Asia, tras descubrir que se utilizaba para facilitar el tráfico de personas, según la Cancillería.