SANTIAGO, 9 dic (Xinhua) -- El ministro de Hacienda de Chile, Felipe Larraín, calificó hoy como "un tema muy relevante para Chile" el acuerdo alcanzado el sábado pasado por la Organización Mundial del Comercio (OMC) en la isla de Bali, respecto de la liberalización del intercambio comercial entre más de 150 miembros.
Se trata del primer gran tratado para la liberalización del comercio en casi 20 años, y se logró durante la cumbre del organismo internacional que se realizó el fin de semana en la isla indonesia de Bali.
A juicio de Larraín, según un comunicado difundido por el Ministerio de Hacienda en su portal, por primera vez en mucho tiempo la OMC acordó tres puntos fundamentales:
En primer lugar, "una reducción significativa de los subsidios a las exportaciones agrícolas, que hacen daño especialmente a los países en desarrollo, y también a Chile".
Como segundo avance destacó "la medida tendiente a hacer más expeditos los trámites burocráticos del comercio, incluyendo temas de ventanilla única, que se aplicarán en forma más generalizada".
En tercer lugar, Larraín valoró, de acuerdo con el comunicado de Hacienda, "la decisión de la OMC en cuanto a reducir al máximo posible los aranceles para los países y regiones (miembros del organismo) más vulnerables del mundo, llegando en algunos casos a su eliminación".
El funcionario aseguró que los acuerdos "van a significar una reducción del orden de 10 por ciento en los costos del comercio, y eso significa un aumento significativo del comercio mundial y de la riqueza que se puede crear, generando empleo".
El ministro también indicó que los acuerdos del organismo se encuentran plenamente en línea con lo realizado por el actual gobierno chileno, porque en Chile, aseguró, ya se encuentra en operación el mecanismo de "ventanilla única" para exportaciones. Explicó que el sistema permite realizar envíos en comercio exterior a través de un computador, trámite que involucra hasta a 19 entidades distintas.
El ministro de Hacienda de Chile reiteró que "en síntesis, el acuerdo de la OMC es un buen acuerdo para el mundo, es un buen acuerdo para Chile y concuerda plenamente con las políticas que ha estado aplicando nuestro gobierno".
El llamado "Paquete de Bali" para la eliminación global de barreras comerciales fue aprobado por la mayoría de los 159 miembros con derecho a voto en la OMC.
Inicialmente Cuba había rechazado a través de su ministro de Hacienda, con el apoyo de Bolivia, Venezuela y Nicaragua, el preacuerdo para la liberalización del comercio mundial, debido al mantenimiento del bloqueo comercial por parte de Estados Unidos contra ese país caribeño desde hace más de 50 años.
Tras la negativa de la isla, el director de la Organización Mundial del Comercio, Roberto Azevedo, postergó hasta el sábado las deliberaciones al respecto. El viernes anterior las delegaciones habían logrado allanar el camino, tras un acuerdo de compromiso con India que permitiría concluir el acuerdo.
Su aprobación se logró después de que Estados Unidos y la Unión Europea (UE) dieran su visto bueno para que India y otros países puedan hacer excepciones a las reglas comerciales de la OMC en la subvención de productos agrícolas a los más pobres.
También se prevé el establecimiento de medidas en la facilitación del comercio, como la simplificación de los trámites aduaneros, que derivarían en crecimiento y más puestos de trabajo, sobre todo en las economías en vías de desarrollo.
Los diez acuerdos incluidos en el "Paquete de Bali" representan el primer gran tratado para la eliminación global de barreras comerciales en décadas.
El proceso se inició con el acuerdo de Marakesh de 1994, con el que se cerró la "Ronda Uruguay" y se dio luz verde para crear la Organización Mundial del Comercio.
En 2001, los miembros de la organización comenzaron a debatir la llamada "Ronda de Doha", que debía eliminar distintos obstáculos al comercio mundial, como las restricciones a las importaciones o los aranceles.
Ese proceso no llegó a término debido a las diferencias entre las economías industrializadas y en desarrollo, específicamente por el tema de los subsidios agrícolas que ofrecen los primeros a sus productores.
A partir del nuevo acuerdo, India, por ejemplo, podrá mantener su programa para la subvención de alimentos a más de 800 millones de pobres, aún cuando vaya en contra de las regulaciones de la OMC.
Lo anterior, tras comprometerse a evitar que la entrega de arroz y cereales a bajo precio no creará problemas en mercados de otras naciones. De todas formas, India fracasó en su intento de no poner un límite temporal a los subsidios.
Por último, el "Paquete de Bali" no sólo reduce los subsidios agrícolas, sino que incluye también distintos pasos que facilitan el comercio, como la simplificación de los trámites aduaneros y de las medidas de apoyo a los países más pobres.