Un juzgado peruano ordenó hoy la suspensión del sorteo cuyo objetivo era escoger a 12.500 jóvenes para el servicio militar en el Ejército, en medio de una polémica porque algunos sectores políticos y sociales consideran que esta medida es inconstitucional.
El Primer Juzgado Constitucional de la ciudad de Lima ordenó al Comando de Reservas y Movilización del Ejército suspender el proceso y cumplir con la decisión judicial, ante un pedido de la Defensoría del Pueblo.
La resolución argumenta que, hasta el momento, no se ha cumplido con justificar las razones del sorteo, porque no hay "riesgo inminente de la seguridad nacional" y "La suspensión del sorteo no genera perjuicio alguno a la entidad castrense".
Según los opositores al reclutamiento por sorteo, en Perú el servicio militar es voluntario y por más que las Fuerzas Armadas de este país no cumplan la cuota de reclutas por medios voluntarios no pueden forzar a los jóvenes a enrolarse.
Otro de los argumentos es que esta forma de reclutamiento también es discriminatorio, porque aquellos jóvenes que salgan sorteados y no quieran ir a los cuarteles pueden pagar una multa y evadir el servicio, mientras que los más pobres si tendrán que enrolarse porque no tienen dinero.
La reacción del presidente peruano Ollanta Humala, al conocer la decisión judicial, fue de reconocimiento al fallo judicial y manifestó que su administración respeta el fallo porque es un gobierno democrático.
El Servicio Militar Obligatorio (SMO) se eliminó en Perú en 1999 y desde esa fecha se implantó de forma voluntaria, pero ante la falta de personal el gobierno peruano busca alternativas como el sorteo, a la cuales se oponen algunos sectores políticos y sociales del país.