El hombre que hizo explotar una pequeña bomba en el aeropuerto de Beijing ha llevado a los tribunales al gobierno municipal de Dongguan por presuntamente haber sido incapaz de certificar que las heridas en sus piernas fueron causadas por los golpes de los oficiales de seguridad mientras trabajaba en esa ciudad meridional china.
Ji Zhongxing fue sentenciado a seis años de prisión a principios de este mes por hacer estallar un aparato explosivo casero en julio en el Aeropuerto Internacional de la Capital de Beijing, hiriéndose de gravedad a sí mismo y de levedad a un oficial de la policía.
De acuerdo con el abogado de Ji, Liu Xiaoyuan, el gobierno municipal de Dongguan estableció un grupo de trabajo para investigar la reclamación de Ji sobre el ataque ocurrido en 2005 y que provocó su parálisis, pero no han hecho públicas sus conclusiones.
Ji, originario de la provincia oriental china de Shandong y confinado a una silla de ruedas, se dirigió solo el 20 de julio a una salida de llegadas de la Terminal 3 del aeropuerto de Beijing para hacer estallar un aparato explosivo improvisado.
Ji también presentó una denuncia contra el Buró Provincial de Seguridad Pública de Guangzhou.
El Tribunal Popular Intermedio de Guangzhou, capital de la provincia meridional de Guangdong, rechazó su caso indicando que el buró "no había violado ningún reglamento referente a la accesibilidad de información gubernamental". Ji había solicitado información con la esperanza de ser informado sobre el "progreso de la investigación."