25/04/2013(Pueblo en Línea)- Según noticias locales, un grupo de científicos británicos desarrollaran un método para que un tipo de bacteria que habitualmente vive en los intestinos de algunos animales produzca diesel.
Con el apoyo de la compañía angloholandesa Shell, un equipo de la Universidad de Exeter, en Devon, pudo hacer que las bacterias produzcan diesel mediante cepas especiales de E. Coli. Sin embargo, la ventaja aquí es que no necesita ser mezclado con productos derivados del petróleo, como se requiere comúnmente para el biodiesel derivado de aceites de plantas.
De acuerdo con el estudio publicado por PNAS, aunque la tecnología todavía se enfrenta a muchos desafíos significativos de comercialización su similitud con el diesel tradicional lo colocan como una opción viable ante otras alternativas.
Esto también significa que esta nueva modalidad puede utilizarse en suministros de corriente con la infraestructura existente, ya que los motores de tuberías y tanques no necesitan ser modificados para sus especificaciones.
De acuerdo con el profesor John Love, del departamento de Biociencias de la Universidad de Exeter, “La producción de un biocombustible comercial que pueda usarse sin necesidad de modificar los vehículos ha sido el objetivo de este proyecto”, dijo. Por otra parte, también estima que “la sustitución por el diésel convencional con un biocombustible de carbono neutral en volúmenes comerciales sería un gran paso hacia el cumplimiento de nuestro objetivo de una reducción del 80% en las emisiones de gases de efecto invernadero para el año 2050″, agregó.
Según los investigadores, la bacteria convierte de forma natural los azúcares en grasa para construir sus membranas celulares. Durante este proceso, los científicos comprobaron que es posible crear moléculas de aceite combustible sintético.
La Escherichia coli es el ser vivo más estudiado por el ser humano y, desde la década de los 70, los científicos realizaron proezas con sus genes para lograr que éstos produzcan insulina para la diabetes o proteínas empleadas para el tratamiento del cáncer, por ejemplo.
Por su parte, los medios de transporte consumen en la actualidad el 60% de la producción mundial de petróleo y su demanda podría dispararse de los 85 millones de barriles diarios registrados en 2007, a los 104 millones para 2030.
De acuerdo con los científicos, la mayor parte de la producción de petróleo se encuentra cada vez más en regiones inseguras, lo que ocasiona interrupciones en la distribución y un aumento de los costes.
Por su parte, Shell también ha sido responsable de centenares de desechos en el río Níger, de los que ha culpado a saboteadores y ladrones de perforar sus oleoductos para robar petróleo. No obstante, el empleo de de la E. Coli supone un gran avance para empezar a solucionar éste y otros problemas relacionados con el combustible.