China y Uzbekistán prometieron hoy en Taskent impulsar aún más la cooperación bilateral y profundizar su asociación estratégica.
Los dos países hicieron la promesa en una declaración conjunta emitida luego de las conversaciones entabladas entre el presidente de China, Xi Jinping, de visita en Uzbekistán, y su homólogo uzbeko, Islam Karimov.
La visita de Xi a Uzbekistán constituye un testimonio de la voluntad política de ambos países para acelerar el desarrollo de la cooperación práctica en diferentes ámbitos, indicó un documento.
Los dos países acordaron mantener consultas regulares en todos los niveles, intercambiar puntos de vista sobre los principales temas bilaterales y mundiales de forma oportuna, profundizar el entendimiento mutuo y coordinar sus posturas en asuntos de interés común.
Ambos países reafirmaron también el apoyo a sus respectivas elecciones de vía de desarrollo, así como a las posiciones en temas de interés fundamental y prometieron mantenerse alejados de cualquier bloque, actividad o tratado que dañe la soberanía, la seguridad y la integridad territorial del otro.
Por otra parte, los dos países prometieron impulsar la cooperación en el rubro de aplicación de la ley, combatir juntos las "tres fuerzas nocivas", es decir, el terrorismo, el extremismo y el separatismo, así como otros crímenes transnacionales, y salvaguardar la seguridad nacional y regional.
También prometieron promover aún más la cooperación dentro de marcos multilaterales como la Organización de las Naciones Unidas y la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) con el fin de contribuir a la paz, estabilidad, seguridad y desarrollo tanto a nivel regional como mundial.
China, se indicó en la declaración, estima en gran medida los esfuerzos realizados por Uzbekistán para mantener un crecimiento económico estable frente a los problemas financieros internacionales y está dispuesta a proporcionar aún más asistencia financiera y técnica para el desarrollo socioeconómico de Uzbekistán.
Los dos países también prometieron mejorar más su estructura comercial, diversificar la cooperación económica bilateral y ampliar el acceso mutuo a los mercados de bienes, servicios y tecnologías avanzadas.
En la declaración, los dos países establecieron el objetivo de aumentar el volumen comercial bilateral a 5.000 millones de dólares para 2017.
Por otra parte, acordaron reforzar la cooperación energética para garantizar una operación segura y estable de largo plazo del gasoducto China-Uzbekistán, promover la exploración y desarrollo conjuntos del petróleo, el gas y el uranio en su estado natural y aprovechar el potencial para la cooperación en energías renovables.
Uzbekistán espera que los empresarios chinos hagan mayor uso de sus zonas económicas especiales y las industriales, las cuales anuncian una brillante perspectiva para la puesta en marcha de proyectos de inversión en gran escala y de beneficio mutuo.
Tras observar que la infraestructura de transporte es de particular importancia para el desarrollo rápido de la cooperación bilateral, los dos países prometieron mantener su cooperación en este sentido y pidieron un pronto comienzo de la construcción del ferrocarril China-Kirguizistán-Uzbekistán.
Entre otras cosas, los dos países también prometieron ampliar los intercambios culturales e interpersonales y acordaron el establecimiento de un Instituto Confucio en la ciudad uzbeka de Samarcanda.
Xi llegó el domingo a Uzbekistán para realizar una visita de Estado al país. Durante su actual gira, el presidente chino ya visitó Turkmenistán y Kazajistán y asistió a la cumbre del G20 en la ciudad rusa de San Petersburgo.
Después de visitar Uzbekistán, el presidente chino realizará una visita de Estado a Kirguizistán, en donde asistirá a una cumbre de la OCS.
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