El presidente chino, Xi Jinping, y su homólogo estadounidense, Barack Obama, reafirmaron el sábado su compromiso con la liberalización del comercio y de las inversiones y su oposición al proteccionismo comercial, dijo el consejero de Estado chino, Yang Jiechi.
Durante su segunda reunión en la finca de Sunnylands, California, los dos líderes dedicaron gran parte de sus conversaciones a los lazos económicos, sobre los cuales ambos opinaron que tienen un amplio espacio y un enorme potencial para mayor crecimiento, dijo Yang a los reporteros.
Ambas partes también acordaron mantener la coordinación y la cooperación bajo marcos como el Grupo de los 20, el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés), la mejora de la gobernación económica global y la promoción conjunta de un crecimiento fuerte, sostenible y equilibrado de la economía global.
Prometieron ejercer las funciones de mecanismos existentes como el Diálogo Estratégico y Económico China-Estados Unidos, la Comisión Conjunta sobre Negocios y Comercio China-Estados Unidos y el Foro de Gobernadores China-Estados Unidos para mejorar la coordinación en políticas y la cooperación pragmática.
Ambas partes elogiaron el acuerdo alcanzado en la reciente novena ronda de negociaciones sobre inversión bilateral y se comprometieron a crear marcos de políticas justos, transparentes y estables para la inversión mutua. La parte china espera que Washington ofrezca un entorno justo para las empresas chinas que inviertan en Estados Unidos. También acordaron expandir los lazos económicos y comerciales en los niveles locales.
Sobre las fricciones comerciales, ambos líderes coincidieron en que el diálogo y la cooperación deberían servir como mecanismo para abordar tales cuestiones.
La parte china indicó que el tipo de cambio del yuan chino se está aproximando al segmento de equilibrio, y Beijing continuará persiguiendo la reforma del mecanismo de formación del tipo de cambio del yuan.
La parte china también señaló que el tipo de cambio del yuan no es el motivo del desequilibrio en la balanza comercial entre China y Estados Unidos.
Antes de dirigirse a la reunión, los dos líderes dieron un paseo por la pintoresca finca Sunnylands, una propiedad de 81 hectáreas de la familia Annenberg en Rancho Mirage, California.
Los dos presidentes celebraron su primera reunión y asistieron a una cena de trabajo el viernes, durante las que intercambiaron puntos de vista sobre asuntos internacionales y regionales de interés común.
Xi llegó a California el jueves tras concluir una gira por tres naciones de América Latina y el Caribe.