La reestructuración económica de China, que está causando la actual desaceleración, beneficiará al país a largo plazo, afirmó este jueves un experto en el marco de la cumbre de líderes del Grupo de los 20 (G20).
Aunque hay informes y análisis negativos sobre la desaceleración económica de China, sus fundamentos son bastante buenos, con un crecimiento del 7,5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), dijo en entrevista con Xinhua Yves Tiberghien, profesor adjunto de ciencias políticas del Instituto de Investigación Asiática de la Universidad de Columbia Británica.
Si se compara China con Estados Unidos y Europa, o con cualquier otro país emergente, se da uno cuenta de que, de hecho, China lo sigue haciendo muy bien, indicó Tiberghien.
Esto puede ser considerado como "una desaceleración bajo control manejada por el Estado, como parte del proceso de reequilibrio", dijo el experto, participante asiduo de las reuniones del G20.
La actual reestructuración implica que China se está esforzando para alejarse de la fuerte inversión en los sectores tales como los bienes raíces y la dependencia de la energía y los recursos, hacia un modelo impulsado por el consumo y un crecimiento respetuoso con el medio ambiente, dijo Tiberghien.
Será un proceso duro y difícil, pero China está avanzando en la dirección correcta, enfatizó el profesor, quien agregó que la segunda mayor economía del mundo va a alcanzar su objetivo de un crecimiento del 7,5 por ciento y "hasta el momento no hay señales de alarma".
En cuanto a los impactos positivos del crecimiento sostenible de China sobre el resto del mundo, Tiberghien anotó que a corto plazo, la capacidad de China de superar sin altibajos las burbujas del sector inmobiliario y la sobreinversión, y realizar un llamado aterrizaje suave, será una enorme contribución al mundo.
"Evitar los impactos negativos es el impacto positivo", señaló.
A largo plazo, el reequilibrio y la reestructuración que está llevando a cabo China para lograr un modelo de crecimiento de alta calidad tendrá un mayor impacto positivo sobre la recuperación y el crecimiento sostenible globales, agregó.
Mientras tanto, el experto elogió efusivamente el papel constructivo que China ha estado desempeñando en los mecanismos multilaterales como el G20 y el BRICS, afirmando que es esencial hacer que las personas que toman las decisiones reconozcan que los intereses públicos son más importantes que los privados.
En ese sentido, el empeño de China en el espíritu de cooperación de beneficio mutuo y los principios de alcanzar intereses comunes y el desarrollo común ha resultado ser el "enfoque correcto", pues es la posición de una gran potencia responsable, anotó Tiberghien.