El Departamento de Comercio de Estados Unidos anunció hoy que emprendió investigaciones comerciales sobre las importaciones de productos de acero eléctrico provenientes de siete países.
Los productos bajo investigación son productos laminados planos de aleación de acero utilizados en la industria de la energía eléctrica, cuyo nombre técnico es acero eléctrico de grano orientado, indicó el departamento en una declaración.
Las investigaciones fueron puestas en marcha a petición de dos productores de acero de Estados Unidos, AK Steel Corporation con sede en el estado de Ohio y Allegheny Ludlum con sede en el estado de Pensilvania y de los Trabajadores Unidos del Acero, un sindicato industrial de trabajadores del acero con sede en Pittsburgh, una ciudad de Pensilvania.
Los reclamantes afirman que estos productos de acero eléctrico provenientes de China, República Checa, Alemania, Japón, República de Corea, Polonia y Rusia fueron vendidos por debajo de su precio justo en el mercado de Estados Unidos con un margen de dumping que oscila entre 38,54 y 257,61 por ciento, además de que los productos originarios de China recibieron subsidios gubernamentales indebidos.
Por consiguiente, el departamento decidió poner en marcha investigaciones de aranceles antidumping contra los productos de los siete países mencionados y una investigación de aranceles compensatorios contra los productos provenientes de China.
La Comisión de Comercio Internacional (CCI), la autoridad comercial de Estados Unidos, tiene programado tomar su decisión con respecto a la investigación preliminar alrededor del 20 de noviembre.
Las investigaciones proseguirán si la CCI determina que las importaciones de productos de acero eléctrico de los siete países dañaron materialmente o amenazaron a la industria interna de Estados Unidos. Posteriormente, el Departamento de Comercio tomará su decisión en cuanto a dumping o subsidios indebidos a finales del año o a comienzos del próximo.
El año pasado, las importaciones de acero eléctrico de grano orientado originarias de China se estimaron en 1,2 millones de dólares y las importaciones de los productos de Japón fueron estimadas en 38,2 millones de dólares, según el Departamento de Comercio.