El Senado de Estados Unidos rechazó hoy por la tarde una propuesta para ampliar la verificación de antecedentes para la compra de armas de fuego, con lo que se da un duro golpe a los esfuerzos para el control de armas encabezados por el presidente Barack Obama y los demócratas.
Con una votación de 54 contra 46, la propuesta para ampliar la verificación de antecedentes no pudo obtener los 60 votos necesarios para avanzar en el Senado.
Obama respondió con rapidez a este fracaso en Capitol Hill con una declaración televisada desde la Casa Blanca para todos los estadounidenses, al lado de algunos familiares de las víctimas de la matanza de diciembre pasado en la escuela primaria Sandy Hook de Newtown, Connecticut.
Después de señalar que este es "un día vergonzoso", Obama hizo énfasis en que la medida para ampliar la verificación de antecedentes fue apoyada por el 90 por ciento de los estadounidenses, pero que una minoría de senadores decidieron que "no vale la pena" proteger a los niños.
"¿En serio?" preguntó incrédulo el presidente, quien agregó que estos legisladores se negaron a escuchar las voces del pueblo estadounidense.
Sin embargo, Obama prometió que el esfuerzo para el control de armas no ha terminado.
La propuesta habría ampliado la verificación de antecedentes para cubrir todas las ventas de armas de fuego en exhibiciones de armas y por Internet, pero habría exentado las ventas entre amigos y conocidos fuera de sitios comerciales.