La presidenta de Argentina Cristina Fernández expresó hoy el respaldo con firmeza al jefe del Ejército, general de división César Milani, a quien recientemente puso en el cargo y advirtió que no aceptará ningún linchamiento mediático de grupos de poder a los que no les interesan los derechos humanos.
Durante un mensaje en cadena nacional desde la Casa Rosada, sede del gobierno federal, Fernández hizo referencia a la situación de Milani, cuyo ascenso a Teniente General -máxima jerarquía militar en esa fuerza- no fue revisado por el Senado luego que el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) impugnara esa promoción.
El CELS, que lidera el periodista Horacio Verbitsky, dió a conocer al menos dos acusaciones sobre el alto jefe militar, por delitos de lesa humanidad cometidos durante el último régimen militar en Argentina (1976-1983).
La mandataria argentina advirtió que "no voy a ser títere de nadie" y aseveró que quienes le habían criticado por su defensa de los derechos humanos, se han convertido hoy en el principal ariete en su contra.
Cristina Fernández reconoció sin embargo, haber pedido "a nuestros senadores que posterguen hasta fin de año el tratamiento de todos los pliegos de ascensos, no sólo uno", en clara referencia a Milani.
La mandataria aseguró además sentirse "como Presidenta responsable de llevar adelante ese legado que él (Néstor Kirchner, presidente 2003-2007) instaló de memoria, verdad y justicia" y, en ese contexto incorporar a las Fuerzas Armadas a ese proyecto de desarrollo nacional e integración latinoamericana.
Expresó que quienes en su momento sancionaron las leyes de Obediencia Debida y Punto Final (durante el gobierno del presidente Raúl Alfonsín 1983-1989), que permitió que caminaran libremente por las calles quienes habían torturado y desaparecido gente, "esos nos acusan hoy a nosotros.
La designación de César Milani al frente del Ejército desató una de las más graves crisis políticas de los últimos meses, luego que se hicieran públicas denuncias por violaciones a los derechos humanos sobre el jefe militar -un experto en inteligencia-, al que la presidenta Fernández propuso, además, ascender a la máxima jerarquía castrense.
Milani, cuya posibilidad de promoción se tratará luego de las elecciones parlamentarias que se desarrollarán el próximo 27 de octubre, fue señalado por el CELS como responsable por la desaparición forzada del soldado Alberto Agapito Ledo durante el último régimen militar y otros delitos de lesa humanidad.
Como consecuencia de esta situación, también quedaron en suspenso las propuestas presidenciales para que sean ascendidos los recientemente designados jefes de la Fuerza Aérea, brigadier mayor Mario Callejo; de la Armada, contra almirante Gastón Erice, y del Estado Mayor Conjunto, general de brigada Luis María Carena.
El CELS, un organismo prestigioso en la defensa y promoción de los derechos humanos, a través de un comunicado formal que hizo público, reveló que recomendó al senador Marcelo Guinle, que "el ascenso del oficial César Santos Gerardo del Corazón de Jesús Milani, debe ser rechazado".
El aviso se produjo unos minutos después de que comenzara a sesionar la Comisión de Acuerdos del Senado, lo que motivó que Guinle cancelara las actividades de dicho comité aunque, luego de la orden presidencial para demorar la sesión, no retomará la actividad iniciada.
En el reporte del CELS esa organización no gubernamental (ONG) recuerda que "desde la finalización de la dictadura", el 10 de diciembre de 1983, se ha "ocupado de exigir la separación de sus cargos de quienes se encuentren sospechosos de haber participado en graves violaciones a los derechos humanos", entre el 24 de marzo de 1976 y la fecha indicada precedentemente.
En el mismo contexto, el ex preso político Ramón Alfredo Olivera, se presentó ante la Justicia en la provincia de La Rioja y denunció a Milani como quien detuvo ilegalmente a su padre y luego a él mismo, a quien sometió a "tres simulacros de fusilamiento cuando se encontraba detenido ilegalmente en un cuartel militar".
La Comisión Nacional por la Desaparición de Personas (Conadep), fue constituida en 1984 por el entonces presidente Raúl Alfonsín, quien designó para presidirla al fallecido escritor Ernesto Sábato.
Las investigaciones realizadas por la Conadep -desarrolladas tanto en el país como en el exterior- fueron publicadas oficialmente por la Presidencia en el conocido texto "Nunca Más".
Por su parte, el general Milani admitió durante una entrevista que concedió en las últimas horas al diario oficialista Página 12, haber sido el responsable de instruir el sumario en contra del desaparecido soldado Alberto Agapito Ledo por desertor.
"Cuando un soldado no se presentaba en cinco noches y cinco días (en su destino), se hacían las actuaciones por deserción", sostuvo Milani, quien relató que "en Tucumán se informó en aquel momento que Ledo había desertado" aunque también admitió que "es obvio que no fue así", ya que es víctima del delito de desaparición forzada.
Coincidentemente, el CELS, en el informe que presentó a la Comisión parlamentaria que trata los ascensos de los oficiales superiores en las Fuerzas Armadas, explica que "los sumarios de deserción fueron el modo de encubrir la desaparición de soldados" durante el régimen militar y resalta que "el caso Ledo llamativamente no aparece en el listado de conscriptos desaparecidos elaborado por el Ministerio de Defensa en 2009".