La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (OHCHR, por sus siglas en inglés) exhortó hoy a las autoridades brasileñas a ejercer la moderación en el manejo de las cada vez más amplias protestas sociales en el país, dijo un vocero de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La oficina de la ONU también "pidió a los manifestantes no recurrir a actos de violencia en la búsqueda de sus demandas", dijo Eduardo del Buey, portavoz adjunto de la ONU, durante la sesión informativa diaria en la sede de la organización.
"La Oficina de Derechos Humanos de la ONU dio la bienvenida a la declaración de la presidenta brasileña, Dilma Roussef, en el sentido de que las manifestaciones pacíficas son legítimas y también al acuerdo del lunes de que la policía de Sao Paulo no empleará balas de goma", dijo Del Buey.
"La OHCHR pidió a las autoridades emprender investigaciones rápidas, minuciosas, independientes e imparciales sobre los informes de uso excesivo de la fuerza", dijo el portavoz.
Las protestas comenzaron el 10 de junio debido principalmente al aumento en el costo del transporte público y a los gastos realizados para organizar la Copa Mundial 2014 y los Juegos Olímpicos de Río en 2016.
Se ha indicado que las manifestaciones son las más grandes jamás vistas en Brasil en más de 20 años y, aunque la mayoría han sido pacíficas, ha habido informes de heridos, arrestos y detenciones de manifestantes y de otras personas en el lugar de los hechos.