Los ministros de Relaciones Exteriores de Brasil, Antonio Patriota, y de Cuba, Bruno Eduardo Rodríguez Parrilla, anunciaron hoy en Brasilia un acuerdo para que unos 6.000 médicos cubanos puedan trabajar en la nación sudamericana.
La iniciativa, que comenzó a ser negociada en la visita de la presidenta Dilma Rousseff a La Habana en enero de 2012, contará con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPAS).
"Nos estamos organizando para recibir un número mayor de médicos aquí, en vista del déficit de profesionales de la medicina en Brasil. Se trata de una cooperación con gran potencial y a la cual atribuimos un valor estratégico", dijo Patriota.
El canciller brasileño dijo que debe ser definido cuál será el proceso para conceder permisos de trabajo a los médicos de Cuba, país que tiene un alto nivel profesional en las áreas de medicina, farmacéutica y biotecnología.
"Brasil está examinando la posiblidad de acoger médicos por intermedio de conversaciones que incluyen a la Organización Panamericana de la Salud, y estamos pensando en algo en torno de 6.000 o un poco más", explicó.
Por su parte, el canciller cubano subrayó que el proceso de actualización del modelo económico cubano abre la posibilidad de ampliar las relaciones entre los dos países.
Entre las áreas mencionadas por Rodríguez Parrilla están el comercio, las inversiones y el turismo, que ofrecen oportunidades para el sector privado brasileño.
"Cuba tiene sumo interés en conocer la experiencia de Brasil en el desarrollo de su economía, de los créditos, de la pequeña y mediana empresa, en el desarrollo de sistemas fiscales e impositivos", señaló, al recordar que Brasil es el segundo socio comercial de Cuba.
Los dos países mantienen una estrecha cooperación en sectores como biocombustibles, construcción, transporte, seguridad alimentaria y salud, además de que desarrollan iniciativas conjuntas de apoyo a terceros países, como Haití.
De acuerdo con la cancillería de Brasil, el comercio bilateral creció más de siete veces de 2003 a 2012, mientras que de 2010 a 2012 las exportaciones brasileñas a la isla caribeña se incrementaron 36,9 por ciento.