(SPANISH.CHINA.ORG.CN)- La comunidad internacional ha respondido ante los ataques sufridos por miembros del Parlamento venezolano, luego de una encarnizada pelea en la Asamblea Nacional. José Miguel Insulza, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), expresó ayer su “preocupación por la ausencia de diálogo político entre los venezolanos”; la Casa Blanca llamó a calmar las tensiones y a cesar las amenazas “contra actores políticos legítimos”. La ONU conminó a los venezolanos a buscar la resolución pacífica, a través del diálogo, de sus conflictos.
Alfredo Keller,un analista dice que “no se atisba una salida a la crisis política que vive el país” porque “el Gobierno no muestra ninguna disposición al diálogo. Sabe que si dialoga tiene que ceder en algo y parece que no está dispuesto a ello”, lo cual ha traido consigo la preocupación internacional por la situación que se vive en Venezuela.
Carlos Correa, director de la asociación venezolana Espacio Público, asegura que“en el país hay una esperanza de que finalmente se produzca una mediación internacional” que acabe con la crisis política.
Los presidentes de los países miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), han expresado su reconocimiento al gobierno de Maduro. Pero, han recomendado dar atención a “cualquier reclamo”, de los participantes en el proceso electoral.
El secretario de Estado, de los Estados Unidos, John Kerry, ha expresado públicamente su negativa a reconocer a Maduro como presidente. A pesar de esto, el portavoz del Departamento de Estado, Patrick Ventrell, admitió que la administración del gobierno de Obama, trabaja con el gobierno venezolano, pero no aclaró si reconoce o no la legitimidad del ejecutivo y comenta que“eso es algo que tiene que decidir el pueblo venezolano. No reconocemos gobiernos. Tenemos relaciones bilaterales con un país y esa relación bilateral continúa”. El gobierno venezolano, por su parte, ignoró los llamamientos a la calma. A su vez, Maduro recriminó a Washington, porque “Estados Unidos no nos respeta” y manifestó que impedirá la aparición de otro Pinochet en su país.
Elías Jaua, ministro de Exteriores, respondió que en Venezuela “hay plena estabilidad social, política, hay un Gobierno legítimo y hay unas instituciones democráticas legítimas” , además rechazó “contundentemente las desmesuradas e injerencistas declaraciones”de José Miguel Insulza, secretario general de la OEA.
El obispo Diego Padrón se refirió a la pelea diciendo que "Las agresiones físicas de algunos diputados en la AN son un acto de violencia que causa tristeza y vergüenza, Venezuela no se merece espectáculos tan bochornosos" y ofreció su disposición a facilitar el diálogo entre el gobierno y la oposición para superar la turbulencia política que atraviesa el país.