El Congreso hondureño aprobó la noche del martes un decreto que suspende al fiscal general Luis Rubí y crea una comisión interventora que durante 60 días estará en el Ministerio Público para mejorar el sistema de justicia en ese país.
Además del fiscal general, fue separado de su cargo el fiscal adjunto Roy Urtecho, mientras dure la intervención.
La comisión interventora estará integrada por tres personas que serán nombradas este miércoles por el Consejo de Seguridad luego de una nómina que presente el Congreso.
Los opositores de la intervención suponen que son los primeros pasos que da el Congreso para destituir al fiscal general y al adjunto.
La semana pasada, el fiscal, el presidente de la Corte Suprema, el jefe de las Fuerzas Armadas y de la Policía, fueron interpelados por el Congreso que pidió explicaciones sobre los pobres resultados obtenidos para disminuir la inseguridad en ese país.