Pekín, 22/01/2014(El Pueblo en Línea)- El foro titulado “Ecuador Crece-Foro Bilateral” se celebró hoy en Pekín, en el cual el vicepresidente de la República de Ecuador, Jorge Glas Espinel, dio un discurso en el que comenzó hablando de la gran oportunidad que su país brinda a China para un desarrollo conjunto. El segundo mandatario llegó este domingo a China, para cumplir con una amplia agenda de actividades que irán desde el lunes hasta el viernes 24 de enero, con el objetivo de lograr nuevas oportunidades para una cooperación mutua en industrias básicas, transferencia de tecnología y conocimiento.
“A pesar de ser países tan distintos y de estar tan lejos geográficamente el uno del otro, ambos países han conseguido fortalecer sus relaciones bilaterales. La clave del éxito en un futuro se encuentra en la cooperación financiera, sobre todo para infraestructuras y fuentes de energía”, dijo el vicepresidente. “Gracias a varias victorias electorales, el pueblo ecuatoriano nos ha dado la oportunidad de trabajar para el país y lograr el bienestar. Ecuador es el país que más invierte en educación superior y salud en la región, según el PIB. El crecimiento del país supera al de otros países latinoamericanos, con un 4%, por encima del promedio, y el país que más invierte en infraestructura, más del 12% del PIB”, explicó Jorge Glas.
Según el vicepresidente, China cuenta con la experiencia, la tecnología y la financiación que necesita Ecuador. A la vez, Ecuador cuenta con los recursos naturales que necesita China para su desarrollo. “Ecuador exporta petróleo, pero importa diesel y otros combustibles. En 2016, gracias a las ocho centrales eléctricas que se están construyendo, siete de ellas por empresas chinas, Ecuador dejará de ser un país importador de energía eléctrica para convertirse en uno exportador”, dijo el vicepresidente. Las energías con las que trabaja Ecuador son lo menos contaminante posible. Nuestro país es el único del mundo que reconoce a la naturaleza en su Constitución. El derecho a la naturaleza es muy importante, y el acceso libre al agua también. Por eso, al plan de desarrollo lo hemos llamado “Plan del Buen Vivir”, con el que se pretende transformar los recursos finitos en recursos infinitos”, explicó Jorge Glas.
Por último, el vicepresidente habló de las maravillas que ofrece su país, y del fortalecimiento del sector turismo: “Ecuador tiene su zona andina, con nevados y volcanes; ofrece costas en las que todo el año se disfruta prácticamente del mismo clima; selva amazónica y paraíso en la Tierra, es decir, las islas Galápago”.
En la actividad, el embajador de Ecuador en China, don José María Borja López, presentó al vicepresidente como uno de los dos artífices de la revolución ciudadana, junto al presidente del país. “Ambos artífices han logrado con un gobierno estable la transformación del país con una obra física, la construcción de la mejor red de carreteras de Latinoamérica, reparación de puertos y aeropuertos, reconstrucción de hospitales y escuelas, lo que mejora el bienestar de la población”, dijo el embajador.
Wan Jifei, presidente del Consejo Chino para el Fomento del Comercio Internacional (CCPIT), participó en el foro organizado por el CCPIT y la Oficiana Comercial Ecuador, al que además asistieron alrededor de 100 representantes de importantes empresas chinas, pertenecientes a los sectores hidroeléctrico, minero, de energía eólica, petróleo, agrícola, petroquímica, siderúrgica, farmacéutica y construcción, entre otras.
Según Wan, China y Ecuador tienen unas economías altamente complementarias y han desarrollado muy rápido la cooperación en agricultura, pesca, recursos naturales, petróleo y minería. Ambos países deben fortalecer la inversión mutua, ampliar las áreas de cooperación, optimizar la estructura comercial y desarrollar el comercio de servicios, aprovechando los mecanismos multilaterales y plataformas a largo plazo como el Consejo de Empresarios de China-Latinoamérica.
El señor Wan también señaló que la recuperación económica mundial se ha desacelerado y algunas economías desarrolladas se enfrentan al reto de la crisis de la deuda soberana. En esta situación, China y Ecuador, ambos países en desarrollo, deberían reducir gradualmente la dependencia de los mercados y fuentes de inversión tradicionales para fortalecer y ampliar el comercio, la inversión y la cooperación entre ambos.