La Asociación Inglesa de Fútbol impuso una suspensión de 10 partidos al delantero del Liverpool, Luis Suárez, por haber mordido a Branislav Ivanovic, defensa del Chelsea, durante el partido de la Liga Premier del domingo, sanción que lo excluirá por el resto de la temporada.
El director ejecutivo del Liverpool, Ian Ayre, dijo que Suárez y el club quedaron "impactados y decepcionados" por el castigo.
La suspensión habitual por conducta violenta es de tres juegos, pero la federación inglesa de fútbol dijo que era "claramente insuficiente".
Suárez tiene hasta el viernes para apelar en contra los siete partidos extra que fueron agregados a su sanción.
"Esperamos que lleguen las razones por escrito mañana antes de hacer algún otro comentario", indicó Ayre en una declaración del equipo Liverpool.
No es la primera vez que Suárez es castigado por morder. Suárez fue suspendido siete partidos en 2010 tras cometer una ofensa similar durante el partido de la Liga Holandesa disputado entre el Ajax y el PSV Eindhoven.