SANTIAGO, 30 oct (Xinhua) -- La serie de al menos 16 sismos que han sacudido desde anoche el sur de Chile, son réplicas tardías del terremoto del 27 de febrero de 2010, afirmó hoy un experto del Centro Sismológico Nacional (CSN).
"Cualquier sismo que ocurra dentro del área de ruptura del terremoto del 27 de febrero de 2010 (entre las ciudades de San Antonio y la Península de Arauco), posterior al terremoto y con magnitud menor, es considerada una réplica hasta varios años después", dijo Mario Pardo, científico del CSN.
Al menos 16 temblores se han registrado en esa zona desde poco antes de la medianoche del martes hasta este miércoles, con un epicentro dentro del área de ruptura del terremoto, próximo a la localidad de Cobquecura, en la región del Biobío.
Dos de esos sismos alcanzaron magnitudes de 5,8 y 5,9, y fueron seguidos por más de una docena de sismos con magnitudes de entre 3 y 4 grados Richter, fenómenos que causaron inquietud en la población.
El mega sismo de 2010, que alcanzó una magnitud de 8,8 grados Richter, es el segundo mayor evento registrado en el país, una de las naciones con mayor sismicidad de la Tierra, dado que su geografía coincide con la conjunción de las placas Nazca y Sudamericana, zona conocida también como Cinturón de Fuego del Pacífico.
"Estas réplicas siguen ocurriendo debido a que las placas de Nazca y Sudamericana no se han acomodado lo suficiente en esa zona después del terremoto. Falta que las placas se acomoden más en esa zona; todavía queda algo de energía en algunas zonas que no se han movido lo suficiente, y se tienen que mover", señaló el experto.
El científico estimó que estos sismos deberían prolongarse por uno o un par de días más en esa área, tras lo cual la actividad sísmica "debería disminuir casi a cero".
"Las réplicas de los primeros meses eran decenas de sismos por día, y eso ha decrecido hasta tener ahora algunos sismos al mes, y seguirá decreciendo hasta llegar a la sismicidad normal", explicó el experto.
Sin embargo, señaló que no es descartable un evento mayor, ya que "es uno de los efectos naturales a los que estamos sometidos por vivir en esta zona. Es el arriendo que le tenemos que pagar a la naturaleza", finalizó Pardo.
El gobierno chileno anunció que este verano se implementará un plan de simulacros para educar sobre prevención de sismos.