Al menos 33 personas murieron y más de 20 resultaron heridas, y se teme que decenas hayan quedado atrapadas bajo los escombros de viviendas que se derrumbaron por un terremoto de 7,7 grados que sacudió esta tarde la provincia de Baluchistán, suroeste de Pakistán.
El distrito de Awaran, localizado a unos 645 kilómetros de Quetta, capital de Baluchistán, fue el área más afectada y donde murieron 30 personas.
Abur Rasheed Baloch, comisionado distrital de Awaran, dijo que la zona sufrió fuertes pérdidas porque muchas casas se vinieron abajo. Indicó que hasta el momento han recuperado 30 cuerpos y más de 20 heridos de debajo de los escombros. Mucha gente sigue atrapada bajo los inmuebles colapsados, indicó.
La prensa local mencionó que tres personas sufrieron lesiones en Balbandin, un pequeño pueblo localizado a unos 280 kilómetros al noroeste de Khuzda, mientras que dos escuelas colapsaron en Hub, a más de 300 kilómetros al sudeste de Khuzda y que varias casas se derrumbaron en Gwadar, una ciudad portuaria localizada en el extremo suroccidental de Baluchistán.
Se declaró una emergencia en hospitales y en los departamentos de gobierno correspondientes en todas las áreas afectadas por el terremoto en Baluchistán, dijo un vocero del gobierno provincial.
El terremoto ocurrió a las 16:29,49 hora local, a una profundidad de 10 kilómetros, dijo el Departamento Meteorológico de Pakistán (DMP).
Fuertes temblores se sintieron en muchas partes del país, desde la ciudad portuaria sureña de Karachi hasta la ciudad oriental de Lahore y en las partes noroccidentales del país.
El terremoto causó pánico en la ciudad de Karachi densamente poblada, donde las personas salieron de sus casas y oficinas, se informó.
Funcionarios del departamento meteorológico local declararon que el epicentro del terremoto se localiza en una área poco poblada y que el impacto del terremoto aún está por determinarse debido a que la comunicación con el área más afectada de Awaran está interrumpida por el movimiento telúrico.