Las autoridades de salud pública de Beijing aseguraron hoy martes que están monitorizando atentamente el virus de la gripe aviar H7N9, que ya ha causado la muerte de dos personas en el este de China.
Los reactivos para las pruebas del virus ya han llegado a la ciudad, añadió el Buró Municipal de Salud Pública de Beijing en un comunicado.
Hace diez años, la capital china se vio afectada por una epidemia de Síndrome Respiratorio Agudo Severo, más conocido como SARS, que desató el pánico entre sus residentes.
La ciudad, con una población de alrededor de 20 millones de personas, ha añadido la gripe aviar al actual sistema de monitorización de la gripe y la neumonía sin causas claras.
Las autoridades han pedido a todos los hospitales de Beijing que se preparen para hacer frente a situaciones de emergencia y garanticen la disponibilidad de suministros médicos suficientes, aunque hasta hoy martes no se había reportado ningún caso.
Los tres casos de infección con el virus H7N9 se han detectado en la municipalidad de Shanghai y en la provincia oriental de Anhui. Por el momento no existe ninguna vacuna contra este virus a escala mundial.